El secretario general de Unidos Podemos, José María Guijarro, aseguró que su partido no va a prohibir una actividad legal como es la caza
El presidente de la Real Federación Española de Caza (RFEC), Ángel López Maraver, su vicepresidente y presidente de la Federación Cántabra de Caza, Ignacio Valle López Dóriga, y la responsable de área, Judith Moreno Linares, estuvieron reunidos ayer con el Grupo Parlamentario Unidos Podemos, “con el objetivo de aclarar definitivamente la posición sobre la caza de esta confederación de agrupaciones políticas”.
En este encuentro participaron José María Guijarro, secretario general del Grupo Parlamentario Confederal Unidos Podemos – En Comu Podem – En Marea; Mae de la Concha, secretaria general en Baleares y adscrita de la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente del Grupo Parlamentario Confederal; y Juan Antonio López de Uralde, diputado de Podemos y coportavoz de Equo.
López Maraver indicó que la RFEC, como representante de la caza en general y, en concreto, de la caza social, e integrante de un colectivo formado por más de un millón de cazadores, exige “conocer claramente y sin medias tintas, si con Podemos podremos o no cazar, ya que los últimos movimientos del partido habían generado gran preocupación en el colectivo”. Guijarro aseguró que su partido “no va a prohibir nada que sea legal y la caza lo es”.
Por su parte, López Ugalde afirmó que no plantean la prohibición de la caza, aunque sí quieren “controlar los impactos ambientales generados por ésta”. Al tiempo mostró su descontento por las críticas de la RFEC hacia su propuesta de ley de modificación del Código Penal en materia de maltrato animal, “porque nunca se ha pedido prohibir”, dado que en su articulado “se excluye a cualquier actividad legal”. Además exigió a la RFEC una “rectificación de las informaciones vertidas”. Ignacio Valle replicó que la redacción “como está, sí afectaría a la caza”, una ambigüedad que se podría haber evitado “si Podemos hubiera contactado con el sector cinegético para exponer sus intenciones, tanto en éste como en otros temas”, añadió Ángel López Maraver.
La RFEC se comprometió a rectificar y así lo manifiesta, pero dejó claro que en esa proposición de ley de reforma del Código Penal hay que excluir la caza y dejarlo plasmado por escrito para que no quepa lugar a equívoco.
“Sobre la caza se ha discutido mucho en Podemos –afirmó De la Concha–. Sin embargo, la filosofía del partido es “respetar a los cazadores siempre que sean cuidadosos con el medio ambiente, con otras especies y cumplan la normativa”, afirmando que su grupo “no está en contra de la caza sostenible”, aunque sí contra “la gestión intensiva de los cotos de caza”.
Juan A. López de Uralde acusó al sector de “ser utilizado por el Partido Popular para asegurarse un nicho de votos”, a lo que la RFEC le contestó que ésta es absolutamente apolítica, como así le corresponde. Sin embargo, es cierto que algunos partidos se han preocupado desde hace tiempo de consensuar con el sector antes de tomar decisiones que le puedan afectar y Podemos no lo había hecho. José María Guijarro, secretario general de Podemos, manifestó su compromiso de continuo diálogo con la RFEC, mostrándose inmensamente agradecida la Federación por este ofrecimiento, al igual que el haberle brindado la oportunidad de este primer encuentro.
El coportavoz de Equo confió en que se puedan llegar a acuerdos porque “no todo es blanco o negro, pero también es normal que haya cosas en las que no se esté de acuerdo”. Puso de ejemplo el lobo y dejó patente que jamás estarán conformes con una política de gestión cinegética del cánido, pues consideran que tiene que protegerse por completo, a lo que el vicepresidente Ignacio Valle contestó que no conocía la realidad del campo, donde la presión social “es muy fuerte contra el lobo en el mundo rural”.
Por último, José María Guijarro añadió que Podemos es un grupo confederal y, aunque es cierto que dentro de él hay algunos sectores muy animalistas, otros muchos no lo son, destacando de nuevo su deseo de mantener, en adelante, un contacto más fluido y directo con la RFEC sobre los temas que afecten a la actividad cinegética.