N.G.- Quisiera referirme a un tema que me ha sorprendido en este mundo de la pesca. Se trata de la normativa de pesca en Navarra para 2010. En el apartado de capturas a sacrificar, me ha llamado la atención lo siguiente, que cito textualmente: «Los ejemplares de peces de especies exóticas siguientes (trucha arco iris, black bass, carpín, lucio, pez gato siluro y alburno), así como aquellas especies no exóticas no autorizadas en la orden foral que se pesquen, deberán ser sacrificadas en el momento de su pesca».
Asombroso. Resulta que estamos empujando a los pescadores desde clubes de pesca, establecimientos y entre los mismos practicantes de este deporte a ejercitarse en la pesca sin muerte, para tener así la posibilidad de disfrutar de la captura y devolverla al agua sin daño en la mayoría de los casos, y estos señores nos obligan a matar peces y, si no lo haces, ¡te pueden caer hasta 250 euros de multa! Pienso que se tenían que haber preocupado antes de cómo, por qué y quién ha arrojado a los ríos estas especies. Ahora ya es tarde para que la trucha de Navarra sea lo que fue, ya que los pescadores hemos tenido que elegir otras especies para seguir disfrutando de nuestra afición y no creo, desde mi humilde opinión, que la solución pase por matar todo lo que no sean truchas pintonas.
Si en la caza se pudiera hacer lo mismo, cuántos cazadores la practicarían sin muerte. Todo llegará.
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