Fundación Artemisan rechaza que la perdiz roja se catalogue globalmente como especie vulnerable
Birdlife Internacional ha incluido este debate en un foro discusión para asesorar a la Unión Europea, quien toma las medidas más relevantes en materia de conservación
Madrid, 8 de abril de 2020. La Fundación Artemisan rechaza que la perdiz roja se catalogue globalmente como especie vulnerable, debate iniciado por Birdlife Internacional en un foro de discusión abierto el 31 de marzo sobre conservación de aves endémicas de la Unión Europea. Con este foro se pretende asesorar a la institución comunitaria, entidad que toma las decisiones más relevantes en materia de conservación de la biodiversidad.
En base a la información que maneja Birdlife International, que apunta a una fuerte regresión de la perdiz en los últimos 10 años, se incluía la siguiente pregunta: ¿debe la catalogación de la perdiz roja cambiar de “preocupación menor” a “vulnerable”? abriendo un periodo de recepción de opiniones que finaliza este miércoles.
Por ello, Artemisan ha registrado un documento en la web de Birdlife International, en el que se recogen los motivos por los que considera que la declaración de la perdiz roja como especie vulnerable no solo respondería a criterios y conclusiones extraídas de informaciones incompletas, sino que además podría tener efectos negativos sobre la conservación de la especie, justamente lo contrario de lo que se pretende.
Para Artemisan, la información en la que se basa Birdlife Internacional es incompleta. Sus datos proceden del programa de seguimiento ‘SACRE’, de Seo-Birdlife, que analiza las tendencias poblacionales (no se realizan cálculos de tamaño poblacional) basando sus conclusiones en estudios con cobertura de un territorio muy reducido (incluso sin referencias claras a los territorios estudiados en algunos periodos). Se dejan fuera amplios territorios dentro de las provincias de Toledo, Badajoz, Ciudad Real y Cádiz (por poner unos ejemplos), sin incluir censos de fincas y cotos en los que existen poblaciones gestionadas y que tienen mayores densidades en comparación con áreas sin gestionar.
Además, la Fundación considera que la declaración como especie vulnerable no corregirá los problemas de conservación a los que se enfrentan la perdiz roja y otras especies con las que comparte hábitat, sino todo lo contrario. Gracias a la ciencia, sabemos que los principales problemas son los cambios drásticos producidos en nuestro campo, la imposibilidad de desarrollar prácticas agrarias respetuosas con la perdiz a gran escala, la dificultad de controlar especies depredadoras (casi 60 depredan sobre la perdiz), junto con las incorrectas decisiones de gestión en algunos cotos.
En este sentido, destaca que pocas regiones en España cuentan con legislación que promueva y dote de fondos a la gestión de poblaciones silvestres. Además, señala que con la declaración como vulnerable de la especie, la primera opción que las autoridades tomarían sería prohibir su caza, pero duda que apliquen planes de conservación. Algo que sí están llevando a cabo muchos gestores cinegéticos desde hace tiempo.
Para Artemisan, la declaración de vulnerable y la más que posible veda de la especie serían la puntilla para aquellos cotos que, en todo nuestro territorio, siguen gestionando las poblaciones de perdices y otras especies que se ven afectada por problemática similar. Sorprende también que no se haya abierto el debate para especies tan emblemáticas como el sisón o la ganga ibérica, que a día de hoy no son vulnerables y podría darse el caso de que tuvieran una menor protección que la perdiz roja.
Por todo ello, Fundación Artemisan considera que para abordar la problemática de la perdiz roja, en primer lugar es necesario completar la información sobre presencia, abundancia y tamaño poblacional de la especie en toda España, a través de un censo nacional de especies cinegéticas, haciendo uso del Observatorio Cinegético ( www.observatoriocinegetico.org).
Esta herramienta, que ya está en marcha, pretende recabar información en tiempo real e in situ, con la implicación de cazadores y gestores cinegéticos, y crear sinergias con las administraciones competentes que ya tienen datos. Desde Artemisan, RFEC y Bineo, ya se está trabajando para acometer el primer censo nacional durante estos años.
Igualmente, consideran fundamental el apoyo decidido, tanto a nivel normativo como presupuestario, a aquellos cotos que cuentan con poblaciones de perdiz roja y a los que quieren recuperarlas. Para Artemisan, uno de los puntos clave será introducir en la futura PAC medidas dentro de los ecoesquemas, además de medidas agroambientales, que cuenten con la suficiente financiación en este nuevo periodo.