Hola a tod@s, lo primero que toca es la presentación, me llamo Andoni Ibarra y voy a ser el responsable de atraparos en relatos sobre la pesca en el mar en esta sección de la revista digital Desveda. En primer lugar, quiero agradecer la oportunidad que me han brindado para poder trasmitiros toda la información posible en este espacio.
Pasada la presentación de rigor voy a contaros el resultado de la última salida con vinilos a por los depredadores de lo oscuro???
La verdad es que nos demoramos en exceso para zarpar y hasta las 20:40 horas no abandonamos el puerto rumbo a la zona de pesca; a pesar de todo no se encuentra muy lejana ya que en escasos diez minutos desde la bocana de puerto llegamos al punto.
Una vez lo alcanzamos nos encontramos con una gran población de redes y palangres por lo que hubo que cambiar de escenario y nos dirigimos a algo más de agua, al estar sobre los 35-40 metros, montamos las cañas y montamos los vinilos; había algo de mar de fondo y un poco de viento que nos hace derivar bastante por lo que montamos cabezas algo mayores de lo habitual de unos 40-45 gramos sobre vinilos tipo ???Pikies??? de colores naturales verdes y marrones.
La pesca con vinilos en vertical consiste en dejar bajar el señuelo hasta el fondo y pasearlo por el mismo ejerciendo tirones verticales de diferentes intensidades y dejándolo bajar de nuevo al lecho con recogidas lentas del carrete. La mayoría de las picadas se producen en el momento de la caída, o en las nuevas caídas producidas por los tirones que produce el pescador.
En cuanto a las especies que se pueden pescar abarcan un amplio rango desde lubinas, abadejos, perlones, cabras???
En este tipo de pesca la paciencia es fundamental ya que es muy importante depurar la técnica empleada.
Finalmente, tras una hora y varias picadas de algún pequeño curioso se produjo una picada de porte, que al principio se resistía a salir de la oscuridad, pero al final acabó cediendo para sacarse una foto y ser devuelta de nuevo a su lugar.