Prácticamente en el ecuador de la temporada de caza, el puente de la próxima semana se presenta esplendido para cazar a nada que el tiempo acompañe. El invierno todavía no ha mostrado su cara más cruda y tanto los de la menor como los de la mayor a buen seguro que aprovecharan la circunstancia. De hecho la presencia de jabalíes en las manchas tradicionales donde la bellota abunde, está siendo una realidad que los cazadores están aprovechando con buenos resultados. Buen compañero el frío, acompaña y los perros bien entrenados mueven perfectamente las manchas a batir. La suerte como siempre vital para que rompan los jabalíes por los puestos y el afortunado de turno con templanza y saber estar pueda doblar el índice en el momento adecuado.
Pero esto que si contado parece tarea fácil no lo es tanto si el cazador no se acompaña de un rifle que no tenga un alza adaptada a sus exigencias. No hay que olvidar que el cazador joven o mayor debe mirar a su arma como un buen compañero que no juzga ni habla pero que participa en todos nuestros aciertos y errores. La primera norma básica que debe prevalecer es que con el rifle bien encarado (sin levantar la cabeza de la culata) observe perfectamente la bola del punto de mira en el vértice del alza abierta, reglada en esta posición a 150 metros. Si la culata está curva y en el momento del encare no se ve el punto de mira el tiro va bajo. Por el contrario, si se ve, está un poco alto el tiro va por encima de la pieza.
Hay que tener muy en cuenta que en el momento del disparo intuitivamente la cara se mete a la culata. Para tirar a grandes distancias siempre mejor las alzas cerradas pero para distancias normales propias de un monte cerrado mejor alza abierta para poder tirar a la carrera. El alza no debe cansar la vista, para lo cual se tendrá que tener en cuenta los brillos y reflejos, sin que por ello se deje de recoger la mayor cantidad posible de luz. Si por defecto de astigmatismo no se ve claramente la línea superior del alza, habrá que saber el grado de astigmatismo que se tiene y buscar un perfil que se acomode al interesado. Para terminar algunas opiniones con aire de consejo. Todas las miras deben ser simples y sólidas que no empujen a errores de estimación de distancias.
Infórmese si se tiene astigmatismo y obrar en consecuencia. Tratar de que las miras no sean tan pequeñas y que fatiguen la vista. Por último trata de de entrenarte encarando el rifle a menudo hasta que inconscientemente busques la alineación adecuada porque en el momento de la verdad vas a disponer de uno a dos segundos como máximo. Y si no te adaptas a tirar con alza, no dudes en ponerle al rifle una buena lente.