El pasado domingo, 7 de abril, se dio el pistoletazo de salida de la temporada de pesca general de Gipuzkoa. La apertura congregó, una vez más, a un gran número de pescadores que, cada uno con sus artes y más o menos habilidad, trataron de engañar a las pintonas y otros peces que pueblan nuestras aguas. Esta temporada, a diferencia de la pasada, los ríos bajaban caudalosos, probablemente más de lo ideal y esta circunstancia supuso una dificultad añadida, pero me consta que más de uno consiguió buenas capturas. Sin embargo, este año la noticia vuelve a ser lo que ha tardado en llegar este ansiado día.
??ltimamente se viene siguiendo la costumbre de retrasar la primera jornada, a sabiendas de que no son las mejores fechas para pescar por lo frío de las aguas y se capturan pocos peces. No hace tanto, la apertura de la temporada se asociaba, inevitablemente, al día de San José, es decir, el 19 de marzo. De igual manera que la caza empieza por Pilaricas. ¿Qué ha pasado con esta fecha tan señalada?
Además, la apertura llega justo después de las vacaciones de Semana Santa, tiempo que muchos pescadores solían aprovechar para practicar su afición. Por lo que muchos se han sentido decepcionados con esta tendencia que parece seguirse en los últimos años.
No obstante, conviene señalar que en las zonas de pesca sin muerte, la temporada arrancó ya el 17 de marzo. En estos tramos sólo se autoriza el uso de la mosca artificial y de la cucharilla o peces articulados con un solo anzuelo y sin arponcillo.
También se especifica en la orden de vedas que queda prohibida la entrada en el agua en las zonas de freza debidamente señalizadas hasta el 30 de abril (para no dañar las puestas). Pero precisamente para pescar con mosca artificial con látigo, entrar en el agua es casi indispensable.
Pero claro, como las mencionadas zonas de freza señalizadas prácticamente no existen, pues no pasa nada. Ya es hora de que las zonas de desove de Gipuzkoa se marquen adecuadamente, porque si no regular en este aspecto carece totalmente de sentido.