El campo de tiro de Zumárraga ha acogido este mes un curso de iniciación al Field Target en el que han tomado parte un total de 200 niños y niñas del Alto Urola. La única asociación de esta disciplina de tiro con carabinas de aire comprimido tiene su sede en Zumarraga, de ahí que en los últimos años se hayan incrementado el número de actividades de divulgación organizadas para que los escolares y sus familias conozcan en qué consiste este deporte.
El Field Target nació en el Reino Unido en los años 80 como una disciplina de tiro al blanco para perseguir roedores, conejos, ardillas y palomas, entre otras especies. Allí es una práctica legal a diferencia de España, donde la caza con carabinas de aire comprimido está prohibida. Su simulación sí se puede, no obstante, de ahí que se recurra a siluetas metálicas que se colocan a diferentes distancias entre los 9 y los 50 metros.
El auge de esta modalidad de tiro recreativo ha crecido en los últimos años. Euskadi, por ejemplo, es la zona del Estado donde esta disciplina ???está a la cabeza y más actividades se organizan???, explica Antonio Padillo. El es el presidente de la asociación vasca que un grupo de aficionados a esta disciplina constituyeron en 2006 y ???que, además, es la única reconocida de la comunidad???, puntualiza. En estos momentos, el número de socios es de 80.
Gracias a este colectivo hay competiciones y exhibiciones de field target en Euskadi durante todo el año. ???Mucha gente se aficiona para no perder la práctica fuera de la época de veda. También hay que tener en cuenta ???añade Padillo- que es un deporte que se puede practicar en familia y en plena Naturaleza, de ahí que cuente con alicientes añadidos???.
Respeto al Medio Ambiente
Los dos campos donde se puede practicar el field target están en Okendo y Zumarraga. En esta última localidad, concretamente, se ha desarrollado los días 17 y 24 de mayo un curso básico que comenzó a celebrarse hace seis años con gran aceptación.
Para poder impartirlo, la Asociación de Field Target de Euskadi cuenta con una estructura de más de doce personas, entre monitores, responsables y ayudantes. El curso incluye formación teórica sobre esta disciplina -tanto sobre su origen, como sobre la normativa que rige el tiro con carabinas de aire comprimido-, pero también sobre el respeto al Medio Ambiente. En la parte más práctica se profundiza en aspectos relacionados con la seguridad.