A pesar de que el tiempo no está acompañando son muchos los pescadores que caña al brazo ocupan ríos y pantanos con la ilusión, por bandera, como siempre, aunque vuelvan a casa calados de agua y lo que es peor, de bolo. A falta de truchas, especies invasoras como lucios, lucio-percas y carpas, por suerte, están dando juego en muchas zonas alavesas. Carpas de hasta 25 kg. se están sacando en algunos pantanos para devolverlas al agua después de las fotos de rigor. Es lo que se estila entre los pescadores de este país y me parece bien, así, habrá más oportunidades de vivir otros lances y mantener al alza el patrimonio acuícola, que falta hace. ¡Pero ay amigo! si los pescadores de turno son vecinos del conde Drac, ya pueden las carpas y demás parientes atarse bien los machos porque la que clavan va directa a la cazuela. No gusta, pero es legal y nadie les va a decir nada aunque algunos frunzan el ceño.
Si me permiten, les puedo decir en su defensa que mucha de esta gente ha pasado penurias y curiosamente los peces de río, a falta de especies marinas, tienen en su país una gran tradición culinaria. A tal extremo que una carpa o un triste lucio no lo cambiarían por la mejor de las merluzas. Y si hablamos de las huevas ni les cuento, son especialistas preparándolas, un manjar para ellos. Todo es acostumbrarse, miren, uno que ha comido hace muchos años en Tobes y Raedo después de un jabón de ocho horas a perdices, ratas de agua y lagartos como gran manjar antaño de los residentes, pues que quieren que les diga, no me sentaron mal.
Peor, mucho peor me parece que algunos que se dicen pescadores dejen por donde pasan plásticos, bolsas, botellas, latas,.. al parecer aquello tan manido antaño en relación a los ríos ???lo que no es de nadie, nadie lo cuida??? para algunos está vigente. Sin embargo se cuidarán muy mucho de tirar basuras delante de los jóvenes, porque sencillamente no se lo permitirían, tienen otro concepto de la ética y el respeto al prójimo. Vamos, que ni una simple ???caña??? permiten que se tire al río. Y mucho menos soportar aquel espectáculo tan desagradable, cuando las vecinas ribereñas, rememoraban ???el agua va» de la época del Medievo tirando bolsas de basura al río.
Seguro que reclamarían luego a los basureros que no les habían limpiado bien la acera. Cazadores y pescadores veteranos posiblemente les den sopas con honda a los jóvenes en muchas facetas de esta práctica, simplemente porque tienen más experiencia y han vivido tiempos mejores, pero de ética y conservacionismo tenemos que aprender de ellos, por mucho que les miremos por encima del hombro. Aunque a veces haya que templar gaitas hay que dar paso a los jóvenes en los puestos de gestión de estas prácticas, en Bizkaia y Álava ya se ha hecho y además con muy buena receptibilidad de los aficionados. Que cunda el ejemplo.