Como lo veníamos anunciando de momento todo sigue apuntando que la temporada va a ser buena en zonas con tradición codornicera. De todas formas, toquemos madera y esperar que esta pequeña gallinácea sensible a los cambios meteorológicos no tome las de Villadiego para disgusto de los cazadores. Pequeña como digo, pero con profundas raíces migradoras a pesar de su limitada capacidad de vuelo. De ahí que busque agruparse para hacer entre ellas una forma de bola para que con el mínimo esfuerzo y vientos favorables llegar a grandes distancias. Así y todo, se dan casos puntuales de las llamadas “caídas” de todo el grupo consecuencia de las tormentas como la que aconteció en el campo de fútbol de San Mamés durante un partido nocturno, posiblemente atraídas por los focos del estadio. Se pueden imaginar la que se preparó entre los asistentes, corriendo como alma en pena por las gradas para hacerse con ellas. Por cierto, El Correo lo publicó con todo detalle. Permítanme una breve mención a dos grandes cazadores que ahora nos acompañan en el recuerdo: Juan Manuel Otegi de Orozko y José A. Gorrotxategi de Elgeta. El próximo 15 de agosto Castilla y León levantará la veda de la codorniz, martes, jueves, sábados, domingos y festivos con carácter nacional y autonómico, y cupo de 25 ejemplares por cazador y día.
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