ONC.- Con el objeto de dar a conocer a todos sus socios las actividades llevadas a cabo durante el año, la Asociación Española de Rehalas (AER) celebró su Asamblea General anual el pasado día 18 de junio el Castillo de Mora de Rubielos, en la provincia de Teruel, en una sala habilitada para tal efecto en esta impresionante construcción de más de 4.000 metros cuadrados que en su día perteneció a la familia aragonesa Fernández-Heredia, que durante los últimos siglos de la Edad Media estableció aquí su residencia.
Durante el transcurso de la Asamblea se aprobaron el acta de la Asamblea celebrada en Trujillo (Cáceres) en 2010 y los presupuestos para el 2011. Su presidente, José Luis Domínguez, informó a los presentes que en la actualidad la AER está compuesta por 800 socios repartidos a lo largo y ancho del territorio nacional, una cifra que dota a la asociación de un peso específico propio dentro del sector cinegético.
Entre algunas de las actuaciones llevadas a cabo por al AER en el último año, destacan la asistencia a diversas ferias de caza y el inicio de los estudios genéticos en la Facultad de Veterinaria de Madrid para apoyar el reconocimiento de la raza paternino andaluz. Así mismo, Jorge Bernad expuso a la asamblea las acciones llevadas a cabo por el Gabinete Jurídico de la AER, entre las que se encuentran diversas reuniones con el Ministerio del Medio Ambiente, SEPRONA y Administraciones autonómicas, alegaciones al proyecto del Reglamento de Armas, a la normativa de animales peligrosos y la referida a núcleos zoológicos, así como el recurso presentado frente a la obligatoriedad de la vacunación anual antirrábica en Andalucía, en colaboración con la Federación Andaluza de Caza, ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. De igual modo, se han realizado numerosas resoluciones de expedientes de los socios, normalmente referidos a faltas de identificación de los perros, eliminación de residuos y cadáveres, desinfección y transporte de los perros.
Al término de la asamblea, José Millán Tarradas, veterinario de Córdoba, impartió una charla sobre selección genética, nutrición y cuidados generales de los perros de rehala y, tras un breve descanso, y ante la imposibilidad del veterinario zaragozano Alberto Cortés de acudir al evento, se hizo cargo de orientar a los presentes, con numerosas diapositivas y demostraciones prácticas, sobre cómo tratar heridas en el campo y administrar los primeros auxilios a los perros de rehala.
Premios 2011 de la AER
Tras la tradicional comida de hermandad de los socios, la periodista Belén Pinilla fue la encargada de presentar los Premios Anuales de la AER correspondientes a la edición de 2011.
Ramón Iglesias Castellarnau, director general de Alimentación del Gobierno de Aragón, fue nombrado Socio de Honor por la colaboración demostrada por su departamento con la AER y la Federación Aragonesa de Caza en la redacción del decreto que normaliza los núcleos zoológicos en Aragón, una norma pionera en España donde se regula, no sólo los núcleos zoológicos, sino, además, el transporte, el espacio mínimo por perro y la desinfección de los remolques. Iglesias quiso que el galardón se hiciera extensivo a José Antonio Guzmán, miembro de su Departamento, por su dedicación en la elaboración de este decreto, un grado de cooperación que el resto de administraciones debería mantener con los interesados para conseguir normas no sólo consensuadas, sino totalmente asumibles por todos los implicados.
También la AER quiso premiar al rehalero turolense Manuel Izquierdo, entregándole un galardón por su labor al frente de la página web de la asociación y por el desvelo demostrado en la excelente organización de esta asamblea celebrada en Mora de Rubielos.
Como ya se notificó en su día, el premio Podenquero de Honor fue para Sebastián Pérez Arjona, perrero por todos reconocido y admirado, originario de Montoro, Córdoba, y que actualmente tiene su rehala al servicio de la Duquesa de Cardona.
Por último, el premio Rehalero Mayor 2011 fue a parar a manos de Emilio Jiménez, veterinario sevillano, por su defensa de la rehala a lo largo de su trayectoria como montero y articulista cinegético, quien quiso agradecer su galardón con unos simpáticos versos titulados “Parafraseando al gran Periquillo Valdueza” y que a continuación reproducimos.
Reunión de podenqueros y de dueños de rehala,
¡para haber sido yo el premiado, ya está la cosa muy mala!
Si yo no tengo podencos ni mastines ni alanos…
Y ando metido en los follones entre Perico y Mariano…
Si yo no conozco la jara…, porque yo soy de Sevilla,
y al único agarre que entro es a un plato de cabrillas…
¡Cómo osáis entregarme esta guapa estatuilla!
Y entre tanta confusión, que alimenta mi despiste,
sólo me queda clara una cosa: ¿Teruel…? ¡Teruel, existe!