La Consejería de Medio Rural prevé que antes de que termine el año pueda aprobarse la modificación de la Ley de Caza para que el Gobierno regional asuma el pago de indemnizaciones por daños causados por el lobo en todo el territorio de la comunidad.
Según ha informado a Efe la Consejería, el borrador para la modificación de la Ley de Caza de Cantabria se encuentra en los servicios jurídicos del Ejecutivo, y se espera que en el periodo de sesiones que se iniciará tras el verano pueda tramitarse en el Parlamento para su aprobación.
El Ejecutivo no tiene mayoría en la Cámara, pero confía en poder contar con el apoyo suficiente para llevar a cabo la modificación de la ley.
Y es que a principios de mayo, Podemos se quedó solo en el pleno del Parlamento en la defensa de una proposición no de ley que pedía mantener el plan de gestión del lobo según lo acordado en la Mesa, y que esta especie fuera no cinegética, en lugar de cinegética, como defiende el Ejecutivo.
En abril el Gobierno de Cantabria anunció su intención de que el lobo se mantenga como especie cinegética y la modificación de la Ley Regional de Caza para posibilitar que sea la Consejería de Medio Rural la que asuma el pago de las indemnizaciones por los daños de esta especie en todo el territorio regional.
Y ello frente a la situación actual, ya que la Consejería solo puede hacerse cargo de los daños que se producen en la Reserva Regional de Caza Saja y en el coto regional de Valderredible.
En el proyecto inicial de plan de gestión del lobo que elaboró la Consejería en la Mesa del Lobo con participación de conservacionistas, ganaderos y cazadores, y que salió a información pública el año pasado, se recogió la consideración como especie no cinegética.
Se atribuía al Gobierno la responsabilidad de las indemnizaciones y se preveía que el control de ejemplares de lobo se llevaría a cabo esencialmente por parte del personal de la Consejería.
Pero en abril la Consejería anunció su intención de que el lobo siga como especie cinegética y que el Gobierno puede hacerse cargo de las indemnizaciones por daños en todo el territorio regional.
Para ello es necesaria una modificación de la Ley de Caza, porque con la actual las indemnizaciones por daños del lobo al ganado las tienen que pagar los propietarios de los cotos.
El borrador para cambiar la ley ya está preparado, está en los servicios jurídicos, y se prevé que entré en el Parlamento para su tramitación en septiembre, aunque antes deberá aprobarlo el Consejo de Gobierno.
Después, cuando la ley se apruebe en la Cámara cántabra, lo que se espera que pueda producirse antes del final del año, el borrador del plan de gestión del lobo tendrá que someterse a un nuevo periodo de información pública, para continuar su tramitación.
El Gobierno ha reiterado que este nuevo escenario no va a variar los objetivos de ese plan de gestión, que será el que establezca el cupo de ejemplares que se podrán cazar en función del estado de la especie.
La única diferencia es que los cazadores podrán colaborar en la gestión de la especie, pero siempre con los parámetros de cupo y zonas fijados por la administración, explican desde la Consejería.