Cazadores de Busturialdea reúnen 800 firmas ante la “prohibición unilateral” del Consistorio de la actividad en el monte Arronategi
El colectivo de cazadores de Busturialdea, aglutinados en torno a la sociedad Txindorra, ha denunciado que el Ayuntamiento de Bermeo “ha tomado unilateralmente la decisión de prohibir la actividad cinegética en las 54,85 hectáreas de Arronategi”, ubicado en la zona de Tribis. La agrupación, que gestiona la zona de caza controlada de Urdaibai, ha reunido más 800 firmas dirigidas a la alcaldesa, Idurre Bideguren, “para que revoque su decisión”.
La actividad está regulada por las denominadas zonas controladas, una modalidad de gestión impulsada desde la Diputación que entró en marcha hace más de una década. Txindorra defiende la compatibilidad de la actividad cinegética con los valores naturales de Arronategi al recordar que “el bosque ha llegado en las condiciones de valores ambientales que tiene hoy en día siendo la caza una de las actividades que históricamente se lleva a cabo en él”. Además afirman que en la última campaña, en la que aún no había entrado en vigor la prohibición del Consistorio, “no ha habido ningún problema ni queja por parte de colectivo alguno”, lo que “demuestra que todas las actividades son compatibles”.
“Sorprendidos por la falta de conocimiento que han mostrado los responsables locales” sobre el funcionamiento de las áreas controladas, Txindorra ha alertado de que la prohibición “tendrá efectos en las zonas rurales más cercanas a Arronategi”. La caza regula la “sobrepoblación de corzos y jabalíes que tantos daños provocan a nuestros baserritarras. ¿Desde el momento que se haga efectiva la prohibición, será el Ayuntamiento quien se haga cargo de los daños provocados por estos animales?”, se han cuestionado. Por último, han apelado directamente a los responsables municipales para “que revoquen la decisión adoptada, escuchen a los cazadores y les ayuden a regular de manera ordenada la actividad cinegética”
Fuente. DEIA