Las capturas de jabalíes descienden un 15% por la huelga en Gipuzkoa

Las capturas de jabalíes descienden un 15% por la huelga

La Diputación asume que no se cumplirá el cupo de 2.268 ejemplares, pero confía en llegar al 90%

Donostia- La huelga de cazadores que se alargó hasta el 21 de septiembre ha provocado que la caza de este mamífero se haya reducido en un 15% en Gipuzkoa, según los datos que maneja la Diputación Foral. Mes y medio después de solucionarse el conflicto, con las batidas recuperadas y a la vista de que aún restan casi cuatro meses para terminar la temporada (31 de marzo), el ente foral confía en que este déficit pueda minimizarse, pero ya asume que será imposible cumplir con el cupo establecido esta campaña para el control de la población de estos animales, fijado en 2.268 ejemplares.

El objetivo, a día de hoy, sería cubrir el 90% de ese cupo, lo que nos situaría en capturas similares a las de la campaña pasada (2018/2019): 2.023 en total, el 100% del cupo para dicha temporada. En definitiva, si se cumplen estas previsiones, la huelga habría provocado que se dejen de cazar en el ejercicio 2019/2020 unos 225 jabalíes de los 2.268 contemplados, con el consiguiente perjuicio para el sector agrario.

Los baserritarras siguen preocupados. Algo más tranquilos, sí, porque la actividad cinegética se ha recuperado y porque la Diputación sigue aumentando los cupos de capturas año tras año en la última década, en la que también se ha ampliado la temporada hasta el 31 de marzo y se ha habilitado un día extra para esta actividad: los jueves.

Pero la caza sigue siendo insuficiente para controlar una especie que sigue creciendo de forma imparable y daña sus cultivos. Un dato: mientras los partes de daños provocados por jabalíes en explotaciones agrarias de Gipuzkoa rondaban entre los 110 y los 120 en la primera década de este siglo -en 2002 solo fueron 39-, a partir de 2012 se multiplicaron por dos y hasta tres, rozando los 400. Más de una denuncia diaria por parte de baserritarras guipuzcoanos por daños de cierta consideración en sus terrenos.

La Diputación foral, que es la encargada de hacer el seguimiento de esta especie, admite que la población de jabalíes sigue en aumento. Los datos así lo demuestran. Las capturas se han cuadruplicado en las últimas dos décadas, pasando de medio millar en 2001 a unas 2.000 en la actualidad. Pero el propio ente foral asegura que este no es un fenómeno exclusivo de Gipuzkoa. “Sucede en muchas zona de Europa”, aclara. Para controlar esa superpoblación de jabalíes, la Diputación amplió hace cuatro años la temporada de caza hasta el 31 de marzo.

Si al cierre de la temporada, el 31 de marzo, se cumplen las estimaciones, se habrían cazado unos 225 ejemplares menos de los estipulados

El control de población que se realiza es detallado, por comarcas -se distinguen doce espacios de caza en el territorio- y permite en cada una de ellas “aumentar la presión en caso de necesidad”. De hecho, el medio centenar de cuadrillas que actualmente operan en la caza mayor del jabalí en Gipuzkoa tienen asignados unos mínimos de capturas.

La presencia de este mamífero en los años 80 era testimonial en Euskadi y se localizaba principalmente en las zonas limítrofes con Navarra y Araba, los dos herrialdes de Euskal Herria que aún hoy registran una mayor presencia de este mamífero. En el Estado se cazaban por aquel entonces unos 30.000 jabalíes al año, mientras que en 2016 se alcanzaron ya los 300.000. Diez veces más. Y la cifra va en aumento.

objetivo: volver a 2011En Gipuzkoa la población comenzó a crecer de manera imparable a partir de los años 90. Ya en la temporada 2001/2002 se cazaron 500 piezas y se avistaron el doble. Pero en la actualidad, la cifra se multiplica por más de tres. Casi cuatro.

El objetivo que persigue el Ejecutivo foral es recuperar los niveles de la temporada 2010/2011, en la que se capturaron 619 ejemplares y se vieron 1.216. Ese sería el punto de equilibrio para que el jabalí no genere tantos problemas en la agricultura.

La Diputación lleva la gestión (corzo y jabalí) a través de un convenio con la Federación de Caza de Gipuzkoa, en la que se encuentran integradas cada año en torno a medio centenar de cuadrillas que se distribuyen por las comarcas. Precisamente, este Convenio de Caza Mayor, que llevaba cuatro años sin renovarse, era uno de los elementos, junto a la prohibición de cazar el monte Ulia, que dio pie a la citada huelga iniciada el 1 de marzo por parte de los cazadores.

El convenio sigue sin firmarse aún, pese a que el preacuerdo entre las partes se alcanzó en septiembre. Entre tanto, los agricultores perjudicados siguen pendientes de cómo se efectuarán las valoraciones de los daños en sus fincas, y, por tanto, sin cobrar indemnizaciones, pero con la tranquilidad, al menos, de que las batidas se han reanudado.

Dentro de la CAV, la mayor población de jabalíes se encuentra en Araba, donde el cupo de ejemplares cazados al año supera ya los 3.000. Y su presencia en Nafarroa es aún mayor, con más de 9.500 capturas.