Los ecologistas piden al Gobierno de Aragón suspender las batidas de jabalí en zonas de osos
Varios grupos conservacionistas firman un comunicado criticando la inacción del Gobierno de aragón y sin prejuzgar el comportamiento del cazador.
Las organizaciones ecologistas han solicitado al Gobierno de Aragón la suspensión cautelar de todas las cacerías de jabalí en zonas con presencia de oso, tras la muerte el domingo de Sarousse en el Valle de Bardají, por ser «incompatibles con su conservación». Piden además, para el resto de prácticas cinegéticas en zonas oseras, una revisión y endurecimiento de los protocolos y requisitos.
La Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ), Fondo Natural, Ecologistas en Acción, Ansar, SEO/BirdLife, Amigos de la Tierra y WWF-España han suscrito un comunicado en el que recuerdan sus denuncias «desde hace años» ante la «inacción y falta de gestión» del Gobierno de Aragón, con esta especie en peligro de extinción y en particular con la osa Sarousse, «abandonada a su suerte durante años».
Los ecologistas no quieren prejuzgar el comportamiento del cazador sino la actitud de la administración al permitir la caza en la zona de hábitat del oso. Están a la espera de ver como avanza la investigación y se reservan el derecho de personarse como acusación particular. «Las investigaciones deben realizarse con cautela y en profundidad por organismos expertos e independientes de toda presión mediática o política hasta lograr su esclarecimiento, respetando la presunción de inocencia tanto del cazador como de la víctima, en este caso una osa adulta que se había asentado en la Ribagorza desde hace casi 15 años».
«Cientos de cazadores con sus armas recorren cada fin de semana los montes de la región sabedores de que la administración carece de medios y personal suficientes para vigilar el cumplimiento de la normativa en cada territorio, inclusive en los espacios naturales protegidos», señala el comunicado, disconforme con que la práctica cinegética se siga autorizando y justificando, «sin ninguna base científica», a su juicio, como actividad esencial para el control de plagas de herbívoros en todo el país.
Sin plan de recuperación del oso
Los ecologistas han recordado la inexistencia de un plan de protección del oso pardo, como especie amenazada. Según ellos, el actual titular del Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona, «ha obstaculizado y dilatando ‘sine die’ la aprobación de un Plan de Recuperación y Conservación de esta especie, instrumento legal imprescindible para articular medidas eficaces que ayuden tanto a lograr la restauración de una población viable de oso pardo en territorio aragonés, como para prevenir, reducir y compensar adecuadamente los daños que pueda causar a la ganadería extensiva».
La desaparición de la osa echa por tierra, en su opinión, varias décadas de intenso trabajo y fondos nacionales y europeos invertidos en la especie. La muerte de Sarousse supone la desaparición del único ejemplar que vivía de forma estable en Aragón, aunque sin descendencia (quizás por encontrarse muy alejada de otros congéneres). Esto acaba, según los ecologistas, con la expectativa, al menos a corto plazo, de la recuperación de un núcleo reproductor en este sector estratégico del Pirineo.
Fuente. heraldo.es