El lobo seguirá clasificado como ‘especie cinegética’ porque la “razón de más peso” para no hacerlo era lograr que el Gobierno de Cantabria pudiera pagar los daños producidos por la especie en todo el territorio de la comunidad autónoma, y la Consejería de Medio Rural lo intentará finalmente a través de un anteproyecto de ley de modificación de la Ley de Caza.
La Consejería mantuvo en 2015 y 2016 diversas reuniones de la Mesa del Lobo –que reúne a representantes de los colectivos más implicados en el debate sobre la gestión de la especie: cazadores, ganaderos y conservacionistas– y ha avanzado en la elaboración de un proyecto de plan de gestión que entre agosto y octubre de 2016 fue sometido a información pública clasificando al lobo como ‘especie no cinegética’.
Oria ha justificado la modificación con respecto al proyecto de plan sometido a información pública porque la “razón de más peso” para cambiar la clasificación del lobo de ‘especie cinegética’ a ‘especie no cinegética’ era lograr que el Gobierno de Cantabria pudiera pagar los daños producidos por el lobo en todo el territorio de la comunidad autónoma –y no sólo en la Reserva del Saja y en el Coto de Valderredible, como ocurre ahora–, y finalmente –“fruto del trabajo” de la Dirección General del Medio Natural de la Consejería de Medio Rural y del Servicio Jurídico de la Consejería de Presidencia y Justicia– la Consejería de Medio Rural lo intentará a través de un anteproyecto de ley de modificación de la Ley de Caza de Cantabria. Así, el departamento que dirige Oria presentará “en las próximas semanas” al Consejo de Gobierno un anteproyecto de ley de modificación de la Ley de Caza para que el Ejecutivo autonómico pagar los daños producidos por el lobo en toda la comunidad autónoma sin modificar la clasificación del lobo de ‘especie cinegética’ a ‘especie no cinegética’.
Fuente. EL DIARIO DE CANTABRIA