Su equipo logró 231 de los 260 votos emitidos por los socios de la entidad deportiva Río Ulla. Con este importante respaldo, Miguel de la Calle Amaro se convierte en el nuevo presidente de una sociedad que reúne a 1.500 integrantes.
Para el otro candidato, Lino Rivadulla, solo tiene palabras de elogio y de respeto, el mismo que hace extensivo al presidente saliente, José Manuel Señorán Gañete. Para el nuevo dirigente, llega el momento de ponerse manos a la obra. Asegura que será un trabajo de equipo. que comenzará por valorar la situación e intentar impulsar la actividad cinegética, la pesca y el bienestar de todos los socios.
–Acaba de ser elegido como presidente de uno de los colectivos más numerosos de A Estrada. ¿Aguardaba un respaldo tan mayoritario de los socios?
–Creo que hay que ser cautos y hasta que se tenga la última papeleta nunca se puede decir… Entiendo que hubo un respaldo mayoritario de los socios, a los que yo les doy las gracias, en mi nombre y en el de la candidatura que presentamos. Los equipos son los que hacen la manera de funcionar, de hacer las cosas, del buen hacer. Tiene que haber una coordinación y no dar una sensación de compartimentos estancos. Creo en los proyectos conjuntos, no en las individualidades.
–Es decir, trabajo en equipo.
–Exactamente. Y creo que los socios eso lo captaron. Quiero agradecerle la confianza que depositaron en nuestro proyecto. Tenemos que trabajar duro y el día 12 tomaremos posesión de la sociedad y veremos cómo están las cosas.
–Como dijo tras conocer el resultado de las votaciones del lunes, llega ahora el momento de ponerse manos a la obra. ¿Por dónde comenzará?
–Lo primero que hay que hacer es pedir una entrevista con el alcalde, como máxima autoridad local, para presentarnos, si puede ser el mismo día 12. Empezaremos a trabajar. Por los tiempos que nos marcan lo primero que tenemos es el Concurso Internacional de Pesca del Salmón, que mantendremos una reunión con la administración por este asunto. Tendremos que ver cuál es la situación del criadero. La gente que formamos parte de la directiva tenemos las funciones distribuidas y cada uno comenzará a trabajar en su campo. Tendremos entrevistas por secciones, de una manera operativa, para saber qué demandan los socios de pesca, de caza, tanto menor como de jabalí, la playa… De ahí empezaremos a desarrollar todos los proyectos que tenemos.
–El Concurso Internacional de Pesca del Salmón será, como señala, la primera asignatura. ¿Piensan introducir algún cambio?
–En la semana próxima, cuando estemos ya ejerciendo, veremos qué ajustes quieren hacer. En base a eso, negociaremos con la administración, veremos cuáles son sus propuestas, ellos oirán las nuestras. Saber lo que hay que hacer e ir concretando. Creo que hay que darle un realce. Buscaremos un sitio idóneo para la entrega de trofeos y esperamos que vengan autoridades, el alcalde y algún cargo de la consellería, y podamos darle el realce que merece este concurso.
–Después de que presentase su candidatura a la presidencia de Río Ulla, avanzó su intención de impulsar la actividad cinegética. ¿Cómo piensa hacerlo?
–En el momento en que tomemos tierra tendremos que palpar la situación. Esta temporada última de caza fue floja. Hubo una suelta de perdices a última hora, los conejos no sabemos cuándo se repoblaron o de qué forma… Entonces habrá que buscar una acción, bien a través de biotopos que en otros cotos están dando su resultado. Es primordial saber cómo está la zona que conocemos los cazadores como Chas de Feáns, lindando con Cuntis, Cesures y Valga. Hay una noticia: los de Valga decidieron escindirse de A Estrada. Es un hecho que nos encontramos consumado.
–Ya había apuntando su intención de conocer la situación para tratar de limar asperezas con estos socios…
–De hecho fui porque me avisaron a una reunión con gente de la zona de Valga, Frades y Requián, que lindan con Valga, y pude palpar la situación. Fui como candidato, porque algún directivo de los salientes interpretó que yo iba como presidente. Fui como candidato y les hablé de mi proyecto, de cuál sería nuestra actuación con respecto a ese monte. Sabemos que esa zona de Valga la hemos perdido, porque la directiva saliente no tomó como una prioridad, el acercarse a ellos.
–¿No hay posibilidad de reconducir esta situación?.
–Entiendo que no. Lo intentaremos. Ayer (por el lunes) vino gente de esa zona a votar.
–En el ámbito de la pesca desea, entre otras mejoras, recuperar el concurso entre socios. ¿Tiene algún proyecto para la playa fluvial?
–Tenemos que mirar cuál es la situación actual, ver si es preciso poner arena, limpiar el cauce, para que el lecho del río no esté con tanto fango. Hay que revisar las instalaciones, el bar, los servicios… Es un pulmón del pueblo.
–¿Cuáles son las metas que se marca al tomar las riendas de Río Ulla?
–Que haya una paz social, una tranquilidad de todos los colectivos que forman la sociedad, tanto cazadores, pescadores, caza mayor, playa… Que haya un orden, un proyecto, un programa para desarrollar. Los miembros de la directiva están ilusionados, los socios también… Nunca son buenas las broncas, las tensiones, los despotismos. Sabemos a dónde queremos ir y por dónde queremos ir. Queremos mejorar la situación. Indudablemente no podemos contentar a todos pero vamos a procurar que la mayoría estén satisfechos. Tomada la posesión de la vivienda –digamos–, ahora vamos a amueblarla, vamos a colocar, ordenar y vamos a funcionar, a gestionar. Yo soy gestor, no soy político. Alfonso Varela, con quien mantengo una amistad desde hace años, me dijo hace muchos años que Fillos e Amigos da Estrada no era política pero tiene su política. Y es cierto, la sociedad no es política ni va a entrar en política. Ahora vamos a estar en campaña electoral, a mí los que inviten a ir a sus mítines, yo voy a asistir, igual que hice cuando estuve en la Feria del Mueble. Miguel de la Calle se debe en estos momentos a la Sociedad Río Ulla, aceptó un compromiso y un reto y lo primero es llevarse bien con todas las instituciones, gobierne quien gobierne.
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