El presidente de la Federación de Cofradías de Gipuzkoa, Eugenio Elduayen, ve con optimismo las próximas campañas de pesca, pero no oculta su preocupación por el alto precio del gasoil, que puede condicionar, advierte, los costes de los barcos en sus largas travesías.
-¿Cómo afrontan el inicio de las próximas campañas de pesca?
-Con la anchoa estamos optimistas, pero ha sido un palo la reducción de la cuota de verdel. Algunos barcos pequeños únicamente se dedican a esta especie y para ellos va a ser muy fuerte la rebaja de la cuota. Los barcos grandes pueden compensar el descenso de verdel con la captura de anchoa. Pero lo que más nos preocupa es el progresivo aumento del gasoil. Los precios van subiendo más y más. No sabemos hasta dónde va a llegar esto. Creo que el alto precio va a condicionar las capturas. Es un consumo que no podemos evitar. Hacemos grandes travesías en la mar y gastamos mucho gasoil.
-¿Les va a perjudicar mucho el fuerte recorte de cuotas de verdel?
-A partir de hoy iniciamos la campaña con el verdel. Con la reducción de cuotas que nos imponen, tendremos que hacer una autorregulación diaria, muy parecida a la que realizamos con la anchoa, con 5.000 kilos de captura de tope los barcos de cerco y 2.300 los de anzuelo.
-Por lo menos en la anchoa disponen este año de una cuota que ha pasado a ser el doble que la de 2010…
-Sí, en anchoa pasamos a tener 11.300 toneladas. Estábamos muy escasos y la cuota ahora es buena. Veremos el precio que pueda resultar. Los estudios certificaban la recuperación de la anchoa. Se vio que había mucha anchoa en la mar y esto desembocó en que el aumento del total autorizado de capturas fuera más que evidente. Somos conscientes de que el mercado ha estado mucho tiempo cerrado y otras anchoas han ido comiendo nuestro terreno en el mercado, aunque el consumidor valora nuestra anchoa. Por ello, nuestra pelea va a ser esa: tratar de recuperar espacio y con ello los precios, con el fin de ganarnos de nuevo el mercado.
-¿Qué pasará este año con el bonito?
-La cuota de bonito va seguir igual. Hubo mucho bonito al principio de la pasada costera y al final fue muy irregular. Con la cuota estamos tranquilos y todo dependerá de lo que nos dé la mar. Por un lado, comparar el ejercicio de 2010 con el de 2009 es hacerlo con una campaña mala. La pasada campaña fue mejor, pero ni mucho menos igual a los resultados de los años 2007 y 2008. Hay que tener en cuenta que en Gipuzkoa en 2005 se consiguieron 6 millones de kilos, en 2006 se lograron capturar 9 millones y en el 2007 bajó a 5,4 millones, caída que se agudizó en 2008 con 3,8 millones y en 2009 hasta los 2,8 millones. En la década de los noventa del pasado siglo se llegaba a capturar una media de 15 millones de kilos entre Gipuzkoa y Vizcaya. Tenemos que recuperar esos niveles.
-¿Y con respecto al atún rojo?
-Tenemos una cuota irrisoria cercana a las 400 toneladas. El Consejo Científico de la ICCAT aprobó una disminución de la cuota. Antes ya era baja, con lo que tampoco nos hace mucho daño. Creemos que con esta especie se está cometiendo una gran injusticia porque los pescadores del Atlántico no somos culpables de los desmanes que se han permitido en el Mediterráneo.