La sobrepoblación de animales alcanza a media Comunitat y el Consell publica una orden para impulsar la captura de ejemplares
Más de la mitad de la Comunitat está afectada por la sobrepoblación de jabalíes. La situación es tal que ha obligado a la Conselleria de Agricultura a emitir una orden que modifica la publicada hace una década por la que se regula la caza de estos animales.
Las poblaciones afectadas por esta auténtica plaga son ya 297 de las 542 que forman parte de la Comunitat Valenciana. Entre los municipios no sólo se encuentran pequeñas localidades rurales sino que el problema afecta también a ambientes urbanos y en el listado de ciudades afectadas se encuentran grandes urbes como Benidorm, Elda, Gandia o Peñíscola, entre otras.
Y es que cada vez son más frecuentes los avistamientos de ejemplares en localidades de gran tamaño. Ante el aumento de ejemplares les faltan recursos para sobrevivir y aparecen en lugares habitados en busca de alimento. No son raros los casos de que aparezcan por la mañana contenedores con toda la basura desperdigada.
Los ataques a cultivos son cada vez mayores, al igual que los accidentes de tráfico que provocan estos animales
El propósito de la orden queda claro en el preámbulo. «Se ha constatado que las medidas aplicadas no son suficientes para frenar la expansión demográfica de la especie, ni la frecuencia y magnitud de sus impactos sobre las actividades humanas y el medio natural».
Justifican la orden en que las capturas anuales de jabalíes han crecido un 116% en los últimos diez años pese a que el número de cazadores en el mismo periodo se ha reducido un 36%.
La población de jabalíes -y también de otras especies como las cabras- se disparó durante el confinamiento. Fueron varios meses sin que se saliera a cazar lo que permitió la reproducción indiscriminada, según han señalado los cazadores.
La orden también deja claro a que se refiere cuando se habla de sobreabundancia de jabalíes: «La existencia de unas poblaciones excesivas que pueden comprometer la conservación del resto de especies o valores naturales y genera un nivel de impactos incompatibles con el normal desarrollo del resto de usos legítimos del territorio».
La sobreabundancia de ejemplares ha provocado en numerosas ocasiones las quejas y protestas de los agricultores pues en su busca de comida los jabalíes terminan arrasando con los cultivos e incluso dañan infraestructuras como las tuberías de riego por goteo. También suponen un riesgo porque pueden propagar enfermedades como la peste porcina africana.
La sobrepoblación de esta especie también se ha convertido en un peligro para los conductores ya que cada vez son más frecuentes los accidentes provocados por estos animales.
La resolución de la conselleria permite cinco modalidades distintas de caza del jabalí. El gancho, la batida, al salto o en mano, el rececho y la espera. La orden también autoriza el uso de jaulas o cajas para atrapar a estos animales siempre que el resto de modos no sean suficientes.
La Conselleria de Agricultura ha fijado también el calendario para la caza. En las modalidades de batida, gancho, al salto o en mano o rececho se podrá actuar entre el 1 de septiembre y el último día de febrero. En cambio, en el caso de la de espera o aguardo se establece todo el año como periodo hábil.
La caza recreativa se regirá por las órdenes de veda, pero el texto señala que en el caso de que la cacería se realice para controlar la población se atendrán al calendario expuesto más arriba. Por otro lado, también se prohíbe la suelta de jabalíes en el monte salvo en el caso de que sea en lugares donde se quiere evitar la endogamia.
La orden también autoriza el uso de algunos medios en la caza por razones de control de la especie que habitualmente están prohibidos si se trata de la práctica deportiva. Entre ellos se encuentran el uso de miras de visión nocturna o térmicas o el empleo de dispositivos electrónicos.
Fuente. lasprovincias.es