Los bosques y montes de la
provincia de Palencia, en concreto los de
Utilidad Pública, generaron el pasado
año la nada despreciable cifra de casi 7
millones de euros, que se reparten entre los
municipios y las entidades locales menores
propietarios de las fincas (85%) y la
Administración Regional (15%)
«para mejoras en el Monte»,
indicó el delegado de la Junta en
Palencia, Luis Domingo González.
Uno de esos aprovechamientos, es el
micológico. Destacado por su peso
social, pero no por la cantidad de recursos que
genera directamente su acotado. Según
explicó ayer el jefe de Servicio de
Medio Ambiente, José María
Martínez Egea, «este año
los Ayuntamientos y las Entidades Locales
Menores pagarán a la Junta unos
15.000 euros por poder acotar sus bosques. A
razón de 50 céntimos por
hectárea». Sin embargo,
indirectamente, generarán más,
puesto que los Ayuntamientos y Juntas
Vecinales luego pueden adjudicar los permisos
para la recolección de hongos en sus
territorios por lo que crean conveniente. Y,
ahí, recuperan lo invertido en el
acotado y ganan dinero. Y además se
generan y avivan negocios dedicados y
vinculados al turismo
micológico.
Tan claro lo han visto que este año
han solicitado el acotado 12 Ayuntamientos y
20 Juntas Vecinales de 21 municipios, cuando
el pasado ejercicio fueron 11 y 14
respectivamente. En total, este año
habrá 31.000 hectáreas de
monte de utilidad acotadas (repartidas en 53
zonas), por las 26.000 hectáreas del
pasado año.
En este sentido, Buenavista de Valdavia es
el Ayuntamiento con mayor extensión
acotada, 3.143 hectáreas, seguido de
la Junta Vecinal de Pino del Río, con
unas 2.700.
Curiosamente, solo un municipio de la
mitad sur de la provincia ha solicitado el
aprovechamiento micológico en sus
montes: Ampudia, con 1.907
hectáreas.
Obviamente, para poder coger setas en
estas zonas acotadas hay que solicitar y pagar
la licencia en el Ayuntamiento propietario. Y
aunque resulte extraño para muchos,
como afirmó el delegado de la Junta,
Luis Domingo Gonzalez, sin ser acotado,
también se debiera contar con el
permiso del dueño de la tierra o el
perdido y, aunque esto es algo mucho menos
regulado o perseguido, podría llegar a
ser un hurto si el propietario lo
denunciara.
Otros aprovechamientos. En todo caso,
económicamente para las arcas de las
Administraciones Locales el mejor
aprovechamiento de las 189.000
hectáreas de montes de utilidad
pública es la maderea.
De los casi siete millones de euros, la tala
y recogida de madera supone «el
48%». Le sigue la caza y los cultivos,
que unidos aportarían el 35% de los
fondos que se basan en el aprovechamiento de
los bosques. Lejos quedan los pastos, el
aprovechamiento apícola, las
piñas y las setas.