Todavía quedan seis jornadas de actividad cinegética por delante y el récord de la Reserva del Saja ha caído. Los 1.172 jabalíes que hasta ahora marcaban el mejor registro de siempre son ya historia.
Y es que durante el pasado fin de semana, en el que se abatieron 89 ejemplares, se superó esta cifra de forma clara. Ahora, con 1.193 cerdos salvajes en su cuenta, la campaña encara su recta final con la intención de incrementar aún más su magnífica cuenta de resultados.
Durante los dos últimos días de caza, los resultados, tal y como cabía esperar, fueron de nuevo brillantes. El número de cupos conseguidos así lo confirma. Uno en Liébana (16 jabalíes cazados en Panda Carrielda por los de la cuadrilla de José Antonio Casares); otro en el Nansa (la cuadrilla de Ángel Pablo Alonso mató cuatro en Soligote); dos más en Cabuérniga (los conseguidos por las cuadrillas de Marcelo Gutiérrez y Juan Manuel Díaz en San Cifrián y Rozalén, respectivamente); tres en Campoo (José Emilio López, en Proaño, Rafael Cosío, en Argüeso, y José Manuel Polanco, en Montabliz); y otros tres en Valdeiguña (Felipe González, en El Tornillo, Alejandro Abad, en Coo, y Ángel Puente, en Montequemao).
Además de estas diez cacerías, las más brillantes del fin de semana, hubo algunas otras que también destacaron, como por ejemplo la del grupo de Jaime Parra en el monte de La Hoyona, al que arrancaron siete ejemplares. Con seis se bajaron de Milebaños los hombres de Tomás Blanco, y con cinco, la cuadrilla de Celestino Cuevas de Poda Cordancas.
Por lo que respecta a Liébana, destacar el accidente sufrido por un montero en la cacería de Cuesta Bernizo, en donde actuaba la cuadrilla de Agustín García. Al acudir al auxilio de sus perros, que estaban siendo atacados por un jabalí, el montero se vio sorprendido por el suido, que arremetió contra él y le asestó un ‘navajazo’ de diez centímetros en una pierna. Asistido por sus compañeros, fue tratado en el centro de salud de Potes, en donde le tuvieron que poner varios puntos de sutura.
Las de La Mahílla y Peña Colsa, en las que se mataron dos ejemplares en cada una, fueron también otras de las cacerías destacadas de la jornada.