Pocos días después de la localización de un cazador furtivo en Albelda de Iregua, agentes forestales del Gobierno de La Rioja, en colaboración con el Seprona de la Guardia Civil, detuvieron el domingo a otro furtivo en San Román de Cameros por matar presuntamente a un jabalí de unos 60 kilogramos de peso.
Según pudo saber Diario LA RIOJA, el suceso ocurrió el pasado domingo sobre las 10 horas, cuando agentes forestales del Ejecutivo regional realizaban un servicio de vigilancia de caza y escucharon ladridos de perros en el monte. Conscientes de que no había ninguna cacería legal programada en la zona, procedieron a recorrer el paraje conocido como Los Linares, perteneciente al coto de San Román de Cameros.
Fue durante el reconocimiento cuando descubrieron a un individuo que arrastraba algo hacia una zona de densa vegetación. Al percatarse de la presencia de los agentes, el sujeto se dio a la fuga perdiéndose entre la maleza.
Los forestales continuaron rastreando esta área hasta encontrar una hembra de jabalí de cuatro o cinco años y un peso aproximado de 60 kilos oculta entre los arbustos, con mordeduras de perro y heridas de arma blanca que, presuntamente, le causaron la muerte.
Oculto en la vegetación
Poco después, con la ayuda de más agentes forestales acordonaron la zona, localizaron al infractor oculto entre la vegetación y llevaron a cabo la identificación y notificación de la denuncia y el decomiso de la pieza.
En el lugar de los hechos se personaron también dos efectivos de la Guardia Civil pertenecientes a una patrulla del Seprona, que acudieron a prestar su apoyo e identificar al presunto cazador como un vecino de la citada localidad camerana, de 50 años.
Se da la circunstancia, según indicaron las mismas fuentes, que el presunto infractor es reincidente en este tipo de actuaciones. A falta de la decisión del juez, la sanción podría ser considerada como grave y llevar aparejada una multa de entre 300 y 3.000 euros.
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