El presidente de la Sociedad de Cazadores, Luis Martínez Lorenzo, ha acusado públicamente a algunos agricultores de «aprovecharse de la situación que permite la Administración», al responsabilizar a los cazadores de los daños producidos en parcelas cultivadas dentro del coto de Toro.
De esta manera, Martínez ha rebatido las críticas realizadas recientemente por agricultores de la organización Asaja quienes, ante los daños sufridos en sus parcelas por los conejos y otras especies cinegéticas, han anunciado que interpondrán una demanda judicial, si el colectivo cinegético no cumple el compromiso adquirido con los cultivadores y hace frente al pago de estas pérdidas.
Ante estas críticas, Martínez matizó en primer lugar que, «a fecha de hoy», la Sociedad de Cazadores de Toro no acumula ningún retraso en cuanto al pago de daños, aunque, como reconoció, «tenemos quejas de agricultores». No obstante, precisó que junto con la Junta Agropecuaria se ha realizado una peritación con la que se ha podido comprobar que «no hay daños, por lo que consideramos que algunos agricultores quieren aprovecharse de la situación».
En cuanto a las pérdidas ocasionadas por los tordos que han denunciado públicamente algunos agricultores, Martínez subrayó que la sociedad que preside ha solicitado recientemente un permiso para poder descastar tordos y córvidos pero, como matizó, «los guardas forestales no han comunicado su denegación por falta de daños». Para Martínez algunos agricultores «abusan» a la hora de reclamar el pago de los daños porque hay quejas por «daños no causados o de daños que pueden ser solventados de manera sencilla» y, sin embargo, «algunos agricultores abandonan el proceso de siembra para pedir más daños». Asimismo pidió a los agricultores que reflexionen y que «se den cuenta» de los ingresos que se perciben por la gestión del coto y de los gastos que ocasiona a lo largo del año.
En este punto, recordó que la Sociedad de Cazadores ha abonado este año a la Junta Agropecuaria Local, tras el acuerdo alcanzado con esta entidad para gestionar el coto de caza, la cuota anual que asciende a 21.000 euros y más de 2.500 euros en concepto de daños, lo que supone en total el 60% de los ingresos del coto. Además, Martínez se mostró convencido de que una de las soluciones es que los agricultores contraten seguros particulares para evitar que «pidan tantos daños a los cazadores» que, como recordó, «han matado más de 700 conejos en los descastes para evitar daños».