La presencia de animales sueltos
en las carreteras carnotanas se ha convertido
en un problema de seguridad vial, dado que
con relativa frecuencia se registran accidentes
de circulación.
Ante esta situación, la sociedad
cinegética y el Concello solicitaron a
Medio Ambiente autorización para
ampliar la superficie en la que pueden llevarse
a cabo batidas.
Pretenden desarrollar esta actividad en
áreas bajas de monte y en parajes
forestales de O Pindo. Sin embargo, hasta el
momento no han recibido
autorización.
Integrantes de la entidad sí
participan de forma semanal en batidas
programadas de caza para controlar la
población de cerdos salvajes ante los
daños que están causando. En la
última, los asistentes lograron capturar
cuatro ejemplares adultos.