La Guardia Civil ha detenido a 16 personas y ha intervenido 101 rapaces vivas y 11 muertas en una operación contra el tráfico ilegal de especies en peligro de extinción.
La operación, denominada Horus, comenzó el pasado mes de enero cuando el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil detectó en Ciudad Real una banda dedicada a expoliar nidos de rapaces, como halcones peregrinos, cernícalos, azores, gavilanes y águilas. Las investigaciones posteriores permitieron descubrir que la red estaba formada por aficionados a la cetrería, coleccionistas de piezas de caza e incluso personas relacionadas con el proyecto de recuperación del Águila Imperial. Sobre esta circunstancia, la Guardia Civil sospecha que estos falsos ecologistas han expoliado nidos de águilas imperiales para presentar los polluelos como obtenidos en el centro gestionado por los ahora detenidos.