La flota de bajura protagonizó ayer el mejor desembarco de anchoa desde que se iniciara la costera, a principios de este mes. En los puertos vascos, los buques descargaron cerca de 250.000 kilos aun ritmo frenético. No obstante, muchos barcos tuvieron que desplazarse a 9 horas de ruta de nuestra costa haciendo un notable esfuerzo de gasto en gasoil.
Hasta 46 pesqueros se registraron en Ondarroa desembarcando anchoa, durante todo el día. El puerto vizcaíno subastó cerca de 150.000 kilos de anchoa, con precios muy variados, según tallas y calidades. En este puerto, la anchoa osciló entre los 1,27 y los 4 euros. En Pasaia se contabilizaron 10.000 kilos, mientras que en Getaria, sus barcos desembarcaron sobre los 90.000 kilos y en Hondarribia cerca de 5.000 kilos.
La cotización media del kilo de anchoa está siendo de 2,10 euros, cantidad que los armadores vascos consideran «muy baja» en relación con la «calidad» que ofrece el producto extraído en el golfo de Vizcaya en comparación con el de otros caladeros.
No agotar la cuota
Esta importante captura de la especie, aunque obtuvo precios muy variados, obliga a los pescadores a estudiar una autolimitación de las capturas, para intentar evitar que se agote la cuota total de este año y mejorar especialmente las cotizaciones en la lonja. La principal preocupación de los pescadores es evitar capturas de anchoa, con tallas sobre los 35-45 granos o piezas en el kilo.
El objetivo del sector pesquero vasco es no agotar el Total Admisible de Capturas (TAC) asignado -12.280 toneladas para España de las 15.600 autorizadas por la UE- vendiendo el pescado a bajo precio y esperar a que las cotizaciones aumenten.
Hasta el momento la flota del Cantábrico había establecido un tope diario de 6.000 kilos por embarcación. Sin embargo, se hizo una excepción que en el caso de la anchoa superior a los 35-55 granos -35-55 piezas por kilo-, para los barcos grandes, se fija en el caso de esta anchoa más pequeña en 3.000 kilos, quedando para los menores en 2.200 kilos. A partir de ahora estos topes bajarán hasta 1.500 kilos para los barcos grandes y 1.100 para los pequeños. Los pescadores aseguran que en las redes de cerco entran ejemplares grandes, mejores que los del inicio de la costera del año pasado. «Hay anchoa de buena talla pero no queremos gastar las posibilidades de captura con precios tan bajos porque tenemos que ir muy lejos a pescarla y los altos precios del combustible hacen que sea difícil rentabilizar la actividad», explicaban desde la Federación de Cofradías de Gipuzkoa.
Para los comercializadores esta propuesta de reducir los cupos de anchoa de inferior talla es «muy positiva porque de esa manera todos podemos obtener mejores precios, pero pedimos que se nos informe de las capturas que van a desembarcar con más antelación, para avisar a la clientela».