El gobierno de España amenaza con desbancar a España del primer puesto en exportación de rapaces
El Ministerio de Transición Ecológica se ha vestido con sus atuendos más animalistas para poner en riesgo cualquier negocio que tenga que ver con los animales, sea la pesca, la cría en cautividad o la exportación de rapaces. España es el país que más halcones exporta del mundo. Lo hace, sobretodo, a los países de la península arábiga y el volumen de negocio es de aproximadamente entre 15 y 20 millones de euros anuales, además de crear hasta 200 empleos directos, según la asociación profesional de avicultores de rapaces seleccionadas Avirases. Ahora este sector se enfrenta a la ruina por los caprichos de un director general del Miteco llamado Luis Mariano González. Transición Ecológica quiere meter mano en la exportación de estos animales a golpe de informe, algo que pondrá en riesgo los plazos y amenaza con desbancar a España del primer puesto en exportación de halcones.
Luis Mariano es el jefe del Área de Acciones de Conservación de la Subdirección General de Biodiversidad Terrestre y Marina del Ministerio de Transición Ecológica y ya se ha enfrentado con pescadores por bloquear la venta de 90 toneladas de marrajo ya capturado en 2020, con los criadores de exóticos por deslizar que llevará a cabo las listas positivas (que solo permitirán tener perros y gatos como mascotas) y ahora con los criadores de rapaces, un sector en el que España ostenta el primer puesto a nivel de exportaciones. Arabia Saudí, Yemen, Omán o los Emiratos Árabes son países que todos los años compran alrededor de 3.000 halcones criados en España, según Juan Alberto López, presidente de Avirases. El precio de cada animal oscila mucho, dependiendo de su genética, pero lo cierto es que este negocio deja en España hasta 20.000.000 de euros, además de generar alrededor de 200 puestos de trabajo directos.
El problema que ha generado de la nada Luis Mariano González es que, tras su llegada al Ministerio de la mano de la ministra Teresa Ribera, ha entendido que él tiene mucho que decir en estas exportaciones de halcones. Son animales criados en cautividad, en ningún caso extraídos del medio natural, que hasta ahora habían sido inspeccionados y controlados por el Ministerio de Industria y Comercio, que ostenta la autoridad administrativa del certificado CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres), fundamental para poder comerciar con animales. A pesar de ello, Luis Mariano impuso el año pasado que Transición Ecológica también tenía que emitir un informe científico antes de exportar estos animales. Y es aquí donde surge el problema.
La exportación de halcones a países del Golfo Pérsico depende de los plazos. España tiene que venderlos y mandar los halcones a los países árabes en julio. Ni antes ni después. Si no se exportan en ese momento, el país que ostenta el número dos en cría y exportación de halcones, Inglaterra, se lleva el premio. Esto responde a las condiciones climáticas y el desarrollo de cada especie. Pero Luis Mariano, con su exagerada obsesión de controlar todo lo que tenga que ver con el comercio con animales, ha impuesto más trámites burocráticos que amenazan con retrasar los permisos y, por tanto, con la posibilidad de exportar las rapaces precisamente en el mes que le toca. “Si nos salimos de julio, España pierde el mercado”, asegura Juan Alberto López.
“El año pasado, Transición Ecológica decía que tenía que emitir unos certificados científicos. Desde la asociación no lo entendimos. Ellos lo basan en los dictámenes de extracción no perjudiciales, y se agarran ahí a decir que todas las exportaciones tienen que contar con el ‘ok’ de Transición Ecológica”, asegura Juan Alberto López, el presidente de Avirases. El responsable último de estos informes es Luis Mariano González, el mismo que se ha propuesto prohibir la cría en cautividad, así como la tenencia de mascotas exóticas.
La sensación entre todos los colectivos de cría en cautividad de animales, así como los pescadores, es que Luis Mariano González no ejerce de lo que es: un funcionario, sino que se ha dejado llevar por sus tesis animalistas, esas que ha vertido en cada programa o documental en el que ha aparecido, para utilizar su cargo, como responsable último de la emisión del certificado CITES, para frenar lo que considera algo injusto. No hablamos ya del riesgo que supone para los criadores de rapaces que no dispongan de los permisos necesarios para exportar sus halcones en su momento oportuno, sino de que Luis Mariano pone en riesgo un negocio de 20 millones de euros anuales por cuestiones ideológicas.
Por el momento, Avirases, una asociación profesional de avicultores de rapaces seleccionadas, ha hecho una consulta a la Abogacía del Estado para conocer si el Miteco tiene competencias para entrometerse en la emisión de informes previos para la exportación de halcones. Hasta ahora, con el Ministerio de Industria se habían entendido bien y no habían aparecido los problemas. Desde Avirases esperan que les respondan en el plazo de seis meses y puedan librarse del yugo de Luis Mariano. Pues donde este funcionario pone el ojo, surgen los problemas con cualquier sector.
Para hacerse una idea de la magnitud de las intenciones del área que dirige Luis Mariano, las fuentes consultadas por MONCLOA.com apuntan directamente a que el jefe de área quiere subcontratar a una empresa pública llamada Tragsa para que se haga cargo de las inspecciones que él considere. Vamos, que quiere un equipo de inspectores a su cargo, ya que todos los que revisan las competencias relacionadas con el certificado CITES hasta ahora dependen de Industria.
Fuente. moncloa.com