El coto de la Valdorba dio el pistoletazo de salida al Campeonato Autonómico de San Huberto. El pasado domingo, se disputó la primera de las dos clasificatorias. El mejor colocado en la tabla acabó siendo Carlos Cenoz, seguido de Miguel Sevillano y Esteban Grande.
Éste tipo de torneos trata de valorar las cualidades naturales y el adiestramiento del perro para poner de manifiesto los aspectos técnicos de este deporte. La prueba se desarrolla con caza salvaje o sembrada (pérdiz o faisán) en terrenos naturales y donde el cazador, con su perro, efectúa un turno de veinte minutos en el que puede utilizar cuatro cartuchos y abatir, únicamente, a dos piezas que se consideran puntuables.
Al cazador le acompaña en su actuación tres jueces, los cuales, en base a los baremos de puntuación establecidos por un reglamento, le van asignando los que consigue en positivo o negativo hasta un máximo de diez puntos. A la hora de valorar a los deportistas se tiene en cuestión tres aspectos.
El primero es la propia conducta del cazador en relación a la pieza de caza y su perro, que puede otorgar un total de 50 puntos. El segundo, la habilidad en el tiro, que se valora sobre 20 puntos. Y por último, la actividad del perro. En éste aspecto entran en juego tanto el adiestramiento como las cualidades naturales del can. Se puntuará sobre los 30 puntos restantes.
En busca del Nacional
El viento huracanado que recorría la Valdorba el pasado domingo no fue obstáculo para que la prueba brillase. Los participantes pasaron las pruebas con éxito. La buena preparación de los animales y la humedad favorecieron que así fuese. La fase autonómica, para la que se han clasificado los cazadores desde las fases de sus sociedades, dará pasaporte para el Campeonato de España de la especialidad.