El presidente de las Cofradías de Gipuzkoa, Eugenio Elduayen, cree que la reducción de la cuota de verdel decretada por la Unión Europea como sanción al exceso de capturas realizado en 2011 puede deberse a un «descontrol» o «mala gestión» del Gobierno central.
En una entrevista concedida a ETB, Elduayen cree que la reducción de la cuota de pesca de verdel para 2012 es consecuencia de «una mala gestión» del Gobierno central porque los arrantzales «han cumplido las normativas vigentes de cupos diarios y semanales».
«Nosotros, una vez descargados, mandamos nuestro diario de pesca con descarga y nosotros no podemos controlar lo que otros pescan, yo puedo controlar lo que trae mi barco, pero no lo del resto, y para eso está la Administración», ha subrayado.
En ese sentido, ha indicado que desde el Gobierno central han argumentado que los partes de descarga «le llegaron tarde, pero nosotros no estamos de acuerdo con ello». «Por lo visto, nos pasamos y de ese incumplimiento de cuota viene la sanción por parte de Europa, pero ha sido más un descontrol por parte del gobierno», ha insistido.
Elduayen ha señalado que la pesca del verdel supone «una fuente de ingresos muy importante para la flota del Cantábrico y ahora hay que reducir la cuota, por lo que en vez de ser una costera importante va a pasar a ser una costera residual».
Anchoa
En cuanto a la anchoa, creo que la cantidad existente de esta especie en aguas del Cantábrico es «importante» y opina que «no debiera haber ningún problema para el mantenimiento, otra cosa es que la mar es la mar y hay muchas variables que no controlamos».
Tras el levantamiento de la prohibición de captura de anchoa en el Cantábrico, Elduayen ha afirmado que «no queda otra que volver a intentar que nuestra anchoa sea la mejor, traer la mejor calidad que podamos, el mejor tamaño posible y regularnos para que no haya desabastecimiento». Tras reconocer que «el camino va a ser duro», ha asegurado que «cada año será mejor».
Por otro lado, ha considerado que «no puede ser que en el mercado haya tanta anchoa que ponga que es elaborada en el Cantábrico», porque «eso no quiere decir que sea del Cantábrico». En ese sentido, ha indicado que los arrantzales quieren que «se diferencie nuestra anchoa, que ponga que es del Cantábrico y luego el que vaya a comprar si es más barata la de fuera o le interesa que sepa que es lo que está comprando».
Por ello, ha abogado por la implantación de la marca de anchoa del Cantábrico porque «hay una duplicidad, hay un poco de engaño», aunque «este año se va a corregir bastante y ya hay una parte de conserveros que ha optado» por una marca de la anchoa del Cantábrico.
En cuanto al bonito, ha señalado la necesidad de realizar un estudio para conocer los motivos de la ausencia de esta especie en la costa del Cantábrico, ya que «ahora le está costando muchísimo entrar y, en vez de venir al Golfo de Vizcaya va para Irlanda».
Elduayen ha señalado que la flota de bajura lleva «unos años complicados» y ha afirmado que 2012, «en principio, se presenta complicado como todos, porque no solo depende de nosostros, de lo que nosotros vamos a intentar pescar, sino que entra otro factor que es la mar, siempre queda esa componente que no se puede controlar», a la vez que ha advertido de que los precios son «altísimos».