La Federación de Caza de Castilla y León, ante la apertura el próximo domingo de la veda general, que echará al campo a cientos de cazadores en busca muy especialmente de la perdiz, ha realizado una serie de recomendaciones para conseguir unas gestiones de los aprovechamientos cinegéticos «sostenibles».
En cuanto a la gestión de las poblaciones insta a llevar un buen censo de las poblaciones «de las distintas especies con objeto de realizar una correcta planificación de la temporada», así como dedicar jornadas «exclusivas para la caza de zorros y córvidos, cuyas densidades en la mayoría de zonas están muy elevadas».
También recomienda la Federación de Caza «controlar el sexo y la edad de las perdices que se abaten en el coto». Precisa, al respecto, que «si se baja de dos jóvenes por cada adulto debemos disminuir la presión, y si se acerca uno a uno debemos dejar de cazar la perdiz».
La Federación de Caza señala que «en los cotos que se han visto polladas de perdiz tardías se debería retrasarse la apertura, al menos una semana». Pone de manifiesto la Federación de Caza que «la muda de la pluma, en un año tardío como éste, acaba en la primera quincena de noviembre, por lo que al principio los cazadores encontrarán las perdices «blandas»».
Apunta como «herramientas útiles» para la gestión de los acotados que es fundamental «reducir el horario», señalando que «cuantas más horas tiene una jornada de caza más fácil es cazar al final de la misma». Incluso, considerando que hará buen tiempo el día de la apertura, indica que «una jornada de unas cinco horas resultaría suficiente». También señala que «lo que mejor se controla son el número de jornadas de caza en toda la temporada». No obstante, hace referencia a que «los cupos son eficaces, pero difíciles de controlar».
La Federación de Caza afirma que los cazadores vienen demostrando desde hace años «un profundo conocimiento de las especies y un respeto hacia el medioambiente, terreno que defienden con ardor ya que es donde desarrollan su principal afición».
Reafirma que la caza «es una actividad que, por el uso manejo de las armas y por su posible incidencia sobre las personas, las cosas y el medioambiente, exige siempre un plus de conocimiento y atención para su práctica».
La Federación de Caza defiende la necesidad de realizar las recomendaciones «de cara a los periodos hábiles en cuanto a estudio de poblaciones cinegéticas, herramientas de gestión, planificación y actuaciones sobre hábitats».
La temporada de caza se aventura «entretenida» el menos en el conejo, aunque la realidad la cantará el movimiento sobre el campo.
Cientos de cazadores que estos días preparan sus municiones para saltar al campo en pos de la libre, la perdiz, el conejo y demás especies cinegéticas acogidas al periodo hábil deben regresar de nuevo a sus casas con los bolsos vacíos por no llevar consigo la guía de pertenencia del arma.
Las armerías no pueden expedir cartuchos sin este requisito porque sólo con esta guía los interesados pueden recoger la munición. «El carnet de identidad lo lleva todo el mundo, pero no la guía», afirma el responsable de la Armería Paco, que ayer mismo vio cómo más de la mitad de los demandantes de cartuchos salieron sin ellos por falta de la citada guía. Considera que «debería haberse remitido algún escrito o mandar algún comunicado a los ayuntamientos para que los alcaldes lo hicieran saber porque es un trastorno para la gente venir hasta Zamora capital desde un pueblo y volver de vacío». Un cazador afirma que «ha estado siempre por ley, pero nunca se había llevado a cabo y ahora se está empezando a llevar la ley a rajatabla. La gente se va, pues, con la cara tonta». Hace referencia a que en las armería de Madrid «ya es imposible porque ni el ordenador expide el ticket si no se hace constar la guía de pertenencia».