La Federación de Caza de
Castilla y León subrayó ayer la
situación crítica que vive la
fauna del norte palentino debido al temporal
de nieve. «La gravísima
situación de las zonas
montañosas de nuestra comunidad pone
a las administraciones responsables en
situación de emergencia y nos crea
también gran preocupación a
los cazadores», aseguran.
«Muchos habitantes de la
montaña se ven impotentes ante la
nieve y las ventiscas que la acumulan una y
otra vez y que hace imposible, por muy bien
equipados y por muchos medios
mecánicos que se tengan, evitar sus
consecuencias, que están sufriendo
personas, animales domésticos y fauna
en general», se recoge en un
comunicado de la Federación de Caza,
que ha preguntado a la Junta de Castilla y
León sobre las medidas que se
están tomando y los esfuerzos y
medios empleados por los responsables del
Medio Natural para paliar la mayor nevada de
los últimos treinta años.
Para ello, los funcionarios y trabajadores
de las reservas de caza de Fuentes Carrionas
están esforzándose en abrir
vías de comunicación, paso
esencial para abastecer a los animales tanto
domésticos como salvajes que
están sufriendo los rigores de este
invierno. «La fuerza del temporal
está haciendo esforzarse al
máximo a los habitantes de estas
zonas tan difíciles de abastecer.
Aún contando con medios avanzados,
los ganaderos tienen tremendas dificultades
para llegar a sus animales y ayudarles en su
alimentación. Los que van al rescate se
están enfrentando a peligros y
dificultades para acceder a los núcleos
de población, esperando que el tiempo
les dé alguna tregua para realizar su
cometido», relatan,
reafirmándose en las voces de
ganaderos y de organizaciones agrarias de los
últimos días.
Tanto ganaderos como cazadores
están trabajando para proporcionar a
los animales alimento de subsistencia, muy
difícil de depositar en los terrenos
donde la fauna se está agrupando, con
grave riesgo de aludes y zonas de hielo de
imposible tránsito a personas y
vehículos.
Además, recomiendan en el
encuentro con animales salvajes o
domésticos, no acercarse en
demasía con medios mecánicos
o vehículos a motor y no dar voces o
apremiarles, ya que en las desbandadas que se
producen, muchos caen en zonas profundas o
con acumulación de nieve,
produciéndose su muerte.
Por otro lado, los celadores
medioambientales han iniciado la recogida de
los primeros cadáveres de animales
salvajes que han muerto por el fuerte temporal
de nieve, una labor que este año se
presume intensa, dado que, según
advierten los expertos, la mortandad
será altísima. Por su parte,
Ecologistas en Acción, insistiendo en
que la prioridad fundamental reside en abrir
todas las carreteras y en atender a todos los
vecinos de los pueblos aislados, considera
difícil valorar los daños
ocasionados en las especies silvestres.
«La nevada ha sido muy inusual y
provocará una selección natural
y sobrevivirán los bichos más
fuertes», señaló ayer
Alberto Fuentes, de Ecologistas en
Acción.