La media veda para la caza en Aragón se abre este domingo, el segundo de agosto, con malas perspectivas en la provincia de Teruel debido a la sequía, que afecta fundamentalmente a la escasez de codorniz en los campos turolenses. Otras especies que ya se pueden cazar a partir de este domingo como la paloma torcaz- no está tan afectada por la carencia de precipitaciones y el adelanto de las cosechas.
12/08/2016 | Diario de Teruel | P. Fuertes
Según el Plan General de Caza de Aragón para la temporada 2016-2017, la media veda se abre el segundo domingo de agosto y finalizará el tercero de septiembre. Además, a partir del 14 de agosto y hasta el mes de abril también se puede cazar conejo en varios términos municipales afectados por sobrepoblación, que en el caso de la provincia de Teruel se dan en el Bajo Aragón histórico y en concreto en los municipios de Albalate del Arzobispo, Andorra, Azaila, Híjar, Puebla de Híjar, Urrea de Gaén y Vinaceite.
El delegado de la Federación Aragonesa de Caza en Teruel, Antonio Gómez, se mostró ayer pesimista con el inicio de esta temporada porque «la sequía ha afectado terrenos idóneos para la codorniz». Comentó que al adelantarse la cosecha, que en algunos lugares se ha llegado a hacer un mes antes que en otros veranos, «no se ven ejemplares».
Esta situación ha hecho que algunos pueblos de la provincia, donde se caza sobre todo codorniz, no abran la media veda o si la abren, porque ya la solicitaron a finales del mes de junio, la cierren, ya que se puede restringir la temporada.
Gómez calificó de «raro» este verano y confió en que pudiera mejorarse algo la situación para la caza de esta especie a finales del mes. En el caso de la paloma torcaz, sin embargo, el inicio de la temporada es más positivo. «Hay en zonas que se está viendo bien», apuntó.
La Federación Aragonesa de Caza cuenta con unas 40.000 licencias, de las que menos de 8.000 pertenecen a la provincia de Teruel.
Tras el inicio de la media veda esta semana, el tercer domingo de septiembre comenzará la temporada para el jabalí, ciervo y gamo, entre otros. La caza menor comenzará el segundo domingo de octubre.
Según el Plan de Caza, en el periodo de media veda únicamente se pueden establecer como días hábiles un máximo de 17 días dentro del periodo hábil, a especificar por el coto.
La provincia de Teruel cuenta en el ejercicio 2016 con 351 cotos, según datos del Gobierno de Aragón. El Inaga (Instituto Aragonés de Gestión Ambiental) tramitó en 2015, un total de 7.379 de las 35.707, que hubo en todo Aragón, a los que se sumaron 14.340 de otras comunidades autónomas, entre las que destaca la valenciana y Cataluña, y 848 de residentes en el extranjero, la mayoría procedentes de Francia.
Trámites
El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) extiende certificados de silencio administrativo positivo para todas aquellas sociedades de cazadores que habiendo presentado su plan de caza no lo tengan aprobado antes de la fecha límite para ello. De esta manera pueden iniciar su actividad deportiva con normalidad y en los plazos establecidos por la normativa. Los cotos que soliciten el certificado deberán haber cumplido, no obstante, con sus obligaciones tributarias.
A principios de este mes el Inaga había resuelto algo más de la mitad de los planes presentados antes del 15 de julio y el objetivo era resolver la mayoría, para lo que se reforzó el equipo destinado a su revisión. Por lo tanto, la mayoría de las sociedades no tiene que recurrir a la solicitud del certificado cuando comience la temporada de media veda.
El resto de los planes se van resolviendo por orden de entrada en el instituto y dentro del plazo de un mes que fijan las normas, aunque si quedaran algunos pendientes se procedería de la misma manera, facilitando el certificado a quienes pudieran solicitarlo.
Impacto económico
El impacto económico de la caza en Aragón es importante como demuestra un estudio que ha realizado la firma Deloitte para la Federación Aragonesa de Caza y que se presentó el pasado mes de julio.
Según este estudio, el sector de la caza aragonesa contribuyó, en la pasada temporada 2015-2016, a la generación en Aragón de 263 millones de euros de PIB y al mantenimiento de 8.793 empleos directos, indirectos e inducidos.
Además, a través de esta actividad la Hacienda Pública recaudó 57 millones de euros vía retornos fiscales (Impuesto de Sociedades, Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas e Impuesto sobre el Valor Añadido).
En concreto, el conjunto de agentes intervinientes en la caza aragonesa -cazadores, sociedad de caza, Inaga, Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad y la Federación Aragonesa de Caza- generó la pasada temporada un gasto de 258,3 millones de euros, de los que el 98 por ciento tuvo como destino geográfico la propia Comunidad de Aragón, lo que se traduce en 253,1 millones de euros de gasto en la región.
El estudio de Deloitte también especifica el perfil del cazador en Aragón. Aseguran que se trata de un hombre asalariado, de 45 años de edad, procede de la Comunidad y tiene unos ingresos medios de 1.600 euros netos mensuales. Además, practica tanto la caza mayor, como la menor y acude, principalmente, a cotos deportivos. El gasto medio anual de los cazadores aragoneses es de 5.225,7 euros.