El récord de capturas en la Reserva del Saja en una temporada parece poco menos que inalcanzable. Al menos, así lo será en la presente campaña, en la que, por el momento, se totalizan 615 jabalíes, una cifra inferior a la del pasado año por estas fechas.
Aunque los resultados han ido mejorando de forma paulatina durante los últimos fines de semana (en el pasado se abatieron 64 ejemplares), igualar la marca de la campaña 2009-2010 (1.174 suidos) es una utopía. Durante las últimas jornadas, volvieron a hacer acto de presencia algunos cupos. Los de Liébana, como es lógico, abultados (el número de capturas permitidas es de 8 ejemplares), aunque en otras zonas también resulta meritorio hacerse con los jabalíes que permite la Ley de Caza.
Los lotes lebaniegos que mejor rendimiento ofrecieron fueron los de Milebaños y Robla Subiedes, en donde se abatieron los ocho legales. Con uno menos se bajaron de Margaperas y con seis jabalíes se volvieron de Arabedes y Cuesta Bernizo las cuadrillas que en estos lotes actuaron. Fuera de Liébana también hubo buenos resultados, como los cosechados por la cuadrilla de Rubén Gutiérrez en Casal Norte, monte al que le arrancaron 5 ejemplares, uno de ellos con un peso de 115 kilos. Sin duda fue una magnífica jornada de caza. La Cestera, Hayedo y Tejeo y Frente y Navas, con tres ejemplares cada uno, también cumplieron en el Nansa, como lo hizo el monte de Vaocerezo, en la comarca cinegética de Valdeiguña, en el se cazaron dos cerdos salvajes.
Peor fueron las cosas en Cabuérniga y en Campoo. La primera sólo ofreció dos jabalíes, los cazados en los montes de Vados Centro y Sur. En la segunda, se hizo un doblete en Izara y se tocó pelo en Fontecha y en Abiada. Con prácticamente dos meses por delante, y si el tiempo lo permite (algo que no ha hecho hasta la fecha), la temporada se saldará con un buen número de jabalíes en su cuenta de resultados, aunque ni mucho menos se acercará a los 1.174 ejemplares con los que se cerro el ejercicio de la campaña 2009-2010.