La práctica de la caza
menor en el término de Pedralba de la
Pradería, que conforma el cuartel 1 de
la Reserva de La Culebra, ha sido una
cuestión problemática en los
últimos tiempos. La polémica
ha terminado, en la última temporada,
con la retirada de los cazadores de Puebla de
Sanabria, que han debido incorporarse para
disfrutar de su afición en el cuartel
número 2 (Robledo y Ungilde)
más en las 282 hectáreas del
Puebla.
Los cazadores del municipio de Pedralba
llevaron el caso ante la Junta de Castilla y
León que, finalmente, les dio la
razón y remitió un escrito a los
cazadores de Puebla para informarles del
cambio. Acabó así una larga
historia en la que los aficionados de Puebla
aprovechaban también escenarios como
Calabor, Santa Cruz de Abranes y Pedralba.
Algo que llevaban haciendo «toda la vida» en
expresión del cazador de la villa,
Manuel Mateos.
En Pedralba mantienen que la ley
«ampara» que solo cacen los propietarios de
los terrenos. Además, justifican su
decisión de expulsar a los de Puebla en
que sus propios hijos no podían cazar
las fincas de sus padres. Y también en
la cuestión económica. No
estaban conformes con el reparto de ayudas
entre Pedralba y Puebla.
El asunto también salió a
relucir anteayer en la Junta Consultiva
celebrada en Zamora. Este cambio es criticado
por quienes aventurar que puede marcar un
precedente para otros municipios.
Hay quien, como José Manuel
Soto, considera que esta nueva coyuntura
«rompe la estructura de la Reserva» y puede
abrir la caja de los truenos «y armarse el
pitote si en otros cuarteles (la Reserva se
divide en ocho) los cazadores deciden hacer lo
mismo». Soto asegura que la ley «es clara» y
si se separan solo podrán realizar el
aprovechamiento cinegético en su
propia localidad.
En estos momentos en cuatro de los ocho
cuarteles en que está dividido el
espacio protegido los cazadores disfrutan de la
caza menor en su propia localidad, en tanto
que en el resto lo hacen en colectividad.
Soto se pregunta «si alguien ha explicado
a los cazadores de las diferentes localidades de
la Reserva de Caza de La Culebra lo que
supone la disgregación para que sean
conscientes de que si cazan en
términos diferentes a su propio
término serán sancionados».
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