El inicio, el primer domingo de abril, de la temporada de la caza del corzo en la modalidad de rececho no ha sido del todo tranquilo.
Cotos de Huesca y Zaragoza han mostrado su malestar por el retraso en la llegada de los precintos obligatorios, de manera que no pudieron inaugurar la campaña. Medio Ambiente, sin embargo, aseguró ayer que todos los precintos habían sido enviados, aunque «en algún caso puede que hayan llegado tarde porque la documentación se presentó también tarde». Los cazadores aseguraron que en cada rececho solo puede participar una persona por precinto, y abatir una única pieza. Dicen que el retraso ha podido favorecer el furtivismo.