Graves daños en los cultivos y un goteo constante de accidentes de tráfico. Son las principales consecuencias del «desmedido aumento» registrado en los últimos años en las poblaciones de jabalí, cabra, corzo y conejo en la Comunitat, situación que origina un aluvión de quejas, especialmente entre agricultores y conductores y que ha obligado a la Conselleria de Medio Ambiente a tomar cartas en el asunto.
29/11/2016 | Las Provincias | DANIEL GUINDO
Según Raúl Esteban, vicepresidente de la Federación de Caza de la Comunitat, la entidad ha acordado un plan de choque para atajar los problemas por la superpoblación de ejemplares. Miembros de la entidad mantuvieron esta semana una reunión con director general de Medio Ambiente, Antoni Marzo, para preparar el plan de acción, que se basará en dos pilares. Por un lado, la Administración ha prometido a los cazadores que agilizará todos los trámites para conceder permisos de caza en zonas en las que se registren quejas de agricultores. «Ahora, el retraso en los permisos hace que cuando acudimos a la zona, los daños son muy grandes y ya es demasiado tarde», apuntó Esteban.
La conselleria también va a conceder «permisos especiales» para que los cazadores puedan actuar en zonas no cinegéticas, como las proximidades a pueblos y polígonos o en espacios protegidos. En estos entornos podrán autorizarse modalidades de caza como la espera (un cazador apostado en un lugar de forma fija) o las rondas diurnas y nocturnas sólo con perros. También se baraja la posibilidad de usar jaulas o cajas-trampa.
El objetivo es empujar a los animales desde estos espacios protegidos hasta cotos en los que poder abatirlos. Esteban indicó que estas zonas en las que no está permitida la caza son, precisamente, los espacios que más daños están sufriendo.
En breve se elaborarán para decidir en qué zonas aplicar las nuevas medidas. Según el vicepresidente de la federación, el Valle de Ayora, Los Serranos, y zonas de Requena y Gandia son los espacios más afectados de la provincia de Valencia.