Los aficionados al parany exhibieron ayer músculo y apoyos políticos en Morella, donde se reunieron para dar un golpe de efecto ante la prohibición de poder desarrollar la campaña de caza, que se inicia el 12 de octubre.
La asociación Apaval logró reunir a políticos de la Comunitat Valenciana, Aragón y Cataluña para que apoyen este tipo de caza y logren legalizarlo.
Los mismo grupos políticos que en el parlamento de Cataluña han prohibido las corridas de toros (ERC, IC-Verds, CiU y PSC) alegando el maltrato que sufren los animales, han dado la espalda esta vez a los ecologistas y apoyan el parany. Es más, se comprometen en su defensa.
La reunión de ayer fue un acuerdo formal de seguir trabajando para conseguir la legalización de esta caza y, sbre todo, de emprender una línea común de actuación entre los partidos políticos.
Las formaciones que ayer asistieron al encuentro de Morella se comprometieron a trasladar al presidente del Gobierno, al Ministerio de Medio Ambiente y al Consejo de Estado el acuerdo y los diferentes estudios científicos sobre esta caza selectiva.
Esta modalidad cinegética no es dañina para las especies que penetran en el parany, defienden los estudios. De hecho, la Geenralitat, atenidndo a estos informes, modificó la ley de caza y convirtió en legal esta práctica.
No obstante, el Gobierno decidió recurrir la ley valenciana al Tribunal Constitucional al considerar que desafiaba sentencias del Supremo.
Representantes de los cazadores castellonenses ya se han reunido con técnicos del Ministerio de Medio Ambiente, entre otras Administraciones, para explicarles esta modalidad cinegética.