Una encuesta entre agricultores señala que los daños por conejos merman entre un 10 y un 30% la producción y se ha incrementado en los últimos años
El proyecto Preveco ha encuestado a agricultores en diversos municipios de Castilla-La Mancha y concluye que los mayores problemas se producen cultivos herbáceos, sobre todo cereales, viñedo, olivar y otros cultivos leñosos como almendro y pistacho
El proyecto de prevención de daños en la agricultura producidos por conejo (Grupo Operativo Preveco) ha realizado una encuesta a agricultores de diversos cultivos, fundamentalmente cultivos herbáceos, viñedo, olivar y otros cultivos leñosos. Del resultado y análisis de dicha encuesta se deduce, entre otras cuestiones, que los daños producidos por el conejo son importantes y se han incrementado en los últimos años.
La encuesta, realizada en el verano de 2020 en diversos municipios de Castilla-La Mancha se diseñó en base a criterios de representación de municipios con mayor afección de daños debidos a los conejos, seleccionando agricultores con diversas producciones, especialmente cultivos herbáceos (sobre todo cereales), viñedo, olivar y otros cultivos leñosos (almendro, pistacho…)
Del análisis de los resultados de dichas encuestas se exponen las cuales son las respuestas principales de los agricultores respecto a los daños de conejo, que ayudan a conocer sus percepciones, a conocer dónde puede haber falta de información, información y a orientar las diferentes medidas del proyecto del G.O. Preveco. Entre las respuestas de la encuesta destacan las siguientes cuestiones:
La gran mayoría de los agricultores encuestados expresaron que han sufrido daños por conejos que van desde el 10 al 30% en cuanto a pérdida de producción, destacando el daño y por orden de prioridad, en viñedo, cereal y olivar, pero también en pistacho y almendro.
Existe una clara percepción del notable incremento de daños a lo largo de los últimos cinco años.
Pese a que los daños producidos por el conejo son una de las principales preocupaciones de los agricultores, se sitúa entre el tercer y cuarto lugar dentro de las amenazas que detectan que se ciernen sobre las rentabilidades de las explotaciones, predominando otros aspectos cruciales como los escasos ingresos que reciben por sus producciones, independientemente del tipo de cultivo, y las adversidades climatológicas, especialmente pedrisco, heladas y sequías.
Compensaciones insuficientes
De los resultados se deriva que consideran que las compensaciones que se reciben por los daños son totalmente insuficientes. La inmensa mayoría piensa que las compensaciones que reciben no son suficientes y que son los titulares de los derechos cinegéticos y los titulares de las infraestructuras quienes deben responsabilizarse de los daños.
En este estudio queda patente la necesidad de ampliar y fomentar, a un coste asequible, los seguros agrarios. Por un lado, para fomentar su uso, ya que la mayoría de agricultores no tiene un seguro que cubra los daños, y ninguno de estos tiene otra forma para compensarlos. Por otro lado, para buscar una solución a la reiterada queja del cese de la cobertura del seguro al tercer año consecutivo de presentación de partes de daños en cereales.
Sensación de que no se controla
Hay una sensación predominante es que no se están utilizando ningún método de control de la población de conejos para la reducción de los daños que ocasionan, aunque entre los que piensan que sí están realizando medidas destaca el uso de caza con escopeta y el huroneo.
Los planes técnicos de caza no están teniendo resultados, y se percibe que el grado de colaboración por parte de los cazadores es escaso ante la gravedad del problema, aunque existe una percepción mayoritaria de que la caza bien planificada puede ser muy útil para controlar los daños. Estos resultados indican claramente que para mejorar la eficacia de esta medida de prevención de daños deben potenciarse las relaciones entre agricultor-cazador.
Dos tercios de los encuestados utilizan alguna medida de prevención, destacando en primer lugar los protectores y en segundo, el vallado. Sin embargo, un tercio de los encuestados no emplea ninguna medida de prevención por diversos motivos, principalmente por considerarlas caras y nada rentables, o por ser poco eficaces e inviables (por ejemplo, en el caso de las vallas que molestan en los trabajos mecánicos) o bien por desconocimiento de la existencia de dichas medidas.
La gran mayoría no tiene conocimiento de si las entidades públicas ejecutan alguna medida para prevenir o reducir los daños ocasionados por el conejo. Existe un sentir generalizado entre los agricultores de que la Administración está haciendo muy poco para poder resolver los daños ocasionados por los conejos en las parcelas agrícolas.
El Grupo Operativo Preveco se centra precisamente en estos últimos problemas, la falta de conocimiento de qué medidas son más eficaces y rentables para prevenir los daños y en poner estos resultados en conocimiento de los agricultores y de esta manera reducir las pérdidas económicas causadas por daños por conejo en las explotaciones agrícolas.
Proyecto Preveco
El Proyecto del Grupo Operativo Preveco se está desarrollando con el objetivo de reducir las pérdidas económicas causadas por daños por conejo en las explotaciones agrícolas, gracias a la aplicación de medidas preventivas. E
l proyecto está coordinado por WWF, y cuenta como socios a UPA, FOMECAM, y la Fundación CBC-Hábitat, y como colaboradores a la Dirección General de Política Forestal y Espacios Naturales de la Junta de Castilla-la Mancha, la Dirección General de Sostenibilidad de la Junta de Extremadura y Agroseguro.
El proyecto finalizará en julio de 2021 con la publicación de unas recomendaciones generales de los métodos más adecuados para la prevención de daños en cada situación. Este proyecto ha sido financiado por el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (FEADER) con un importe de 547.511,29 euros, estando cofinanciado al 80% por la Unión Europea.
Fuente. eldiario.es