Una nueva ley de caza necesaria
¿Por qué es necesaria una nueva Ley de Caza en La Rioja? La actual normativa data de 1998 y se ha quedado obsoleta. Por ello se hace necesario dictar una nueva que se adecúe a la realidad actual.
La anterior ley ya cumplió con su objetivo que no era otro que el de regularizar la actividad de la caza mediante planes técnicos, así como el de establecer sistemas de vigilancia que todos ya han asumido.
Sin embargo, el anteproyecto realizado y presentado por la Consejería de Sostenibilidad y Transición Ecológica, donde se excluyó la participación de los cazadores de la comunidad, dinamita el actual modelo de gestión de caza en la región, un modelo basado en la caza social. Y en este escenario desde la Federación Riojana de Caza se ha tomado la decisión de presentar una Iniciativa Legislativa Popular (ILP).
Esta ILP, una iniciativa sin precedentes en La Rioja y que marcará el futuro de la caza en la comunidad, aborda dos cuestiones fundamentales. La primera es la gestión cinegética, que actualmente se desarrolla mediante permisos extraordinarios que contradictoriamente se están produciendo de manera ordinaria. Y la segunda es el carácter social de la caza. Cabe señalar que está culturalmente arraigada en todo el territorio nacional, con una gran trascendencia económica, ya que afecta a colectivos profesionales que obtienen rentas con su práctica -entre otros, veterinarios, hostelería y turismo-, además de suponer una importante fuente de ingresos para la administración pública y, en especial, para corporaciones municipales y mancomunidades.
La caza como medio de gestión cinegética se ha convertido en un instrumento eficaz y pertinente para el mantenimiento de un medio natural de calidad.
Asimismo, la ILP incide en que los terrenos cinegéticos no deben ser considerados únicamente como un derecho de contenido económico, sino como un modelo de gestión ambiental. En él debe primarse el uso ordenado, compartido y común, y protegerse que la constitución y gestión de los cotos favorezca a colectivos deportivos o entidades locales vinculados a ese territorio en concreto y no priorice la explotación económica de los mismos, como pretende el anteproyecto presentado desde la Consejería, donde cualquiera puede constituir un coto y determinar quiénes pueden cazar en él.
Cabe recordar que la actividad deportiva relacionada con la caza en La Rioja representa la segunda en importancia en cuanto a número de federados y practicantes.
Fuente. frdcaza.org