Una patrulla de seguimiento de
fauna abatió ayer un ejemplar de lobo
ibérico en el término municipal
de Cañizo, dentro de la Reserva de la
Lagunas de Villafáfila.
Esta captura se incluye dentro de las
labores de control de la especie que
efectúa la Junta de Castilla y
León para disminuir el número
de ataques al ganado, según
explicó a través de un
comunicado.
El ejemplar fue cazado dentro de la
Reserva, donde se localizan explotaciones
ganaderas afectadas por ataques durante el
último mes, especialmente en los
términos municipales de
Villarrín de Campos, Villalba de la
Lampreana y San Agustín del
Pozo.
Precisamente, fue en esta localidad donde
se produjo el pasado mes de septiembre uno
de los últimos ataques de
cánidos con el balance de dos ovejas
preñadas y otra herida . La
acción fue perpetrada por un solo
ejemplar en pleno día y en presencia
del propio ganadero.
Ante esta situación, el personal de
la Reserva, con el apoyo de la Patrulla de
Seguimiento de Fauna, formada por personal
especializado del Servicio Territorial de Medio
Ambiente de Zamora, consiguió abatir
al animal en colaboración con los
agricultores y ganaderos de la zona para el
desarrollo de la operación.
Cojera
El lobo abatido presentaba una fuerte
cojera y la decisión de eliminarlo
responde al marco de la normativa de caza,
«dado que se trataba de un ejemplar que
presentaba una especial querencia al ganado
doméstico, siendo responsable de la
mayor parte de los ataques en la Reserva de
la Lagunas, por lo que su control
disminuirá de manera significativa el
número de siniestros».
La actuación se realizó
como complemento a las medidas que la
Consejería de Fomento y Medio
Ambiente aplica para «compatibilizar» la
existencia del lobo ibérico con el
desarrollo de la actividad en explotaciones
ganaderas de la comarca.