Europa vuelve a plantarle cara al veneno en el medio natural y aprueba la cofinanciación del proyecto internacional LIFE+ Biodiversidad ???Acciones innovadoras contra el uso ilegal de cebos envenados en áreas piloto mediterráneas» impulsado por la Fundación Gypaetus, junto con organizaciones procedentes de Portugal, España, Grecia y Creta, como socios.
La inicitaiva se basa en marcar con emisores satélite o de radio a cuervos, zorros y buitres con el fin de que sean éstos utilizados en la detección de cebos envenenados, la primera causa de mortalidad no natural para especies amenazadas en Europa como el oso y el águila imperial.
Entre las acciones innovadores del proyecto figura el marcaje de 320 ejemplares de especies muy sensibles a las sustancias tóxicas -fundamentalmente cuervos, zorros y buitres leonados- en zonas naturales de Andalucía, Portugal, Grecia continental y Creta. El seguimiento de estos animales ofrecerá información sobre la probabilidad de morir envenenados y otro tipo de pistas.
El proyecto, que cuenta con un presupuesto global de 5,6 millones de euros, se desarrollará a lo largo de los próximos 5 años en 8 áreas piloto de Andalucía, Portugal, Grecia continental y Creta con el principal objetivo de evaluar la efectividad de diversas acciones innovadoras basadas en acuerdos voluntarios con los principales colectivos rurales (corporaciones locales, sector ganadero y cinegético) implicados en la lucha contra esta grave amenaza ambiental y para la salud pública.
Cabe resaltar que el uso ilegal de cebos envenenados es la principal causa de muerte no natural para especies amenazadas en Europa como el buitre negro, alimoche y águila imperial, así como una de las principales causas para otras especies como el lobo o la nutria, además de suponer la extinción del quebrantahuesos y el oso en muchas zonas de España y Europa. De hecho en la península ibérica, esta práctica es un delito tipificado con hasta dos años de prisión.
Esta ambiciosa iniciativa internacional supone para la FG una nueva oportunidad para seguir avanzando en la lucha contra el uso ilegal de cebos envenenados en Europa, ???testando la eficacia de nuevas estrategias que complementen las acciones coercitivas y de sensibilización, con otras eminentemente participativas orientadas a combatir, desde dentro, la verdadera raíz del problema: las motivaciones subyacentes que llevan a determinados ganaderos a seguir usando el veneno como una herramienta de gestión de sus explotaciones???, explican en su web.
De ese modo, el proyecto servirá, también, para disminuir el nivel de conflicto tradicionalmente asociado a las relaciones entre actividades rurales tradicionales, como la ganadería o la agricultura y los programas de conservación de especies.
Según un informe de WWF, unos 7.200 animales murieron por veneno entre 1990 y 2003, y la Junta de Andalucía cifró en 1.200 las muertes habidas en su territorio en el periodo 2001 y 2008, siendo aproximadamente la mitad de estas especies protegidas (entre ellas las rapaces).
El mencionado proyecto LIFE, con un presupuesto global de 5,6 millones de euros, es financiado por la Comisión Europea, la Junta de Andalucía, el Ministerio de Medio Ambiente de Grecia y la Cámara Municipal de Idanha A Nova (Portugal).