La llegada de las lluvias ha hecho que la campaña de setas en Álava se recupere; una situación que han aprovechado con creces varios furtivos para «hacer su agosto». A comienzos de noviembre los vigilantes forales sorpredían a un desaprensivo en los montes de Caranca (Valdegovía) con 55 kilos de níscalos y, en esta ocasión, han sido los agentes de la Ertzaintza y Miñones de Álava los que han «pillado» en las localidades alavesas de Artziniega y Amurrio a un grupo de personas con más de 30 kilos de hongos recogidos de manera ilegal.
Según fuentes de la policía vasca, estos individuos fueron identificados a primera hora de la noche de ayer, lunes, después de que varios particulares alertaran de su presencia en una zona rural de Amurrio, donde estaban recogiendo gran cantidad de setas que guardaban en bolsas de plástico. Los agentes les ocuparon un total de trece cajas cargadas con distintas variedades de hongos que guardaban en tres furgonetas.
Durante la mañana de hoy, patrullas de la Ertzaintza volvían a localizar a varios de los integrantes del grupo en Artziniega, cuando trataban de reanudar la recogida de setas.
La Diputación de Álava lleva a cabo desde 2009 la normativa foral que pone límite a la recogida de hongos y frutos silvestres. Solo se pueden recolectar dos kilos de setas por persona y día y además está prohibido, entre otras cosas, usar rastrillo y llevar lo obtenido en bolsas de plástico.
El organismo sancionador es la sección de Montes de la Diputación y la multa prevista puede ir de los 30 a los 250 euros.
No soy setero, pero poca multa me parece. Cada vez que voy a Castro la Benemérita me registra mochila, coche y demás, mientras de la playa salen buzos con pulpos (especie prohibida en cantabria) pero como son del pueblo ni puto caso… eso sí, que te pillen pescando con unos cangrejillos y no tengas ticket de compra, que te meten un puro…
Yo también me alegro Miguel Angel, lo malo que ya les habrán soltado y seguirán haciéndolo. Hay que pararles los pies a esos saqueadores.
Quienes me conocen, saben que he sido un gallo de pelea en todos los sentidos. Jamás me acojoné ante nada ni nadie. Y QUE CALLARA, NO QUISO DECIR QUE ME RINDIERA CUANDO LA SUERTE ME DIO LA ESPALDA. Yo, pago todas mis cuentas. Y quién tuvo, retuvo y guardo para la vejez. Pues bien. El año pasado me fui a becadas a mi coto de Palencia. Había una niebla infernal y me fui a un pinar a por robellones. Había una furgoneta aparcada en el pinar donde yo los iba a cosechar y con el consiguiente cabreo me fui dos parcelas de pinos más allá. En éstas estaba cuando llegaron tres rumanos en la furgoneta que vi aparcada momentos antes y me dijeron que ni se me ocurriera tocar ni una seta de las que habían comprado. Me quedé quieto. Se me acercaron. Recuerdo que uno tenía un diente de oro. Les dije que qué coño decían, que ese pinar era un comunal y además estaban en el coto donde yo cazaba y cazo. Me contestaron que hiciera lo que quisiera, pero que ya me conocían. Ni corto ni perezoso me fui a quejar a la autoridad competente y me recomendaron que no hiciera nada. Qué yo iba mucho al campo sólo y que no eran trigo limpio.
Luego, les veía todos los días y encima se reían. Al final no me bajé un día del coche con una vara de acebo que llevo porque mi mujer se puso de por medio. Pero ellos se reían y me dijeron que si les hubiera tocado, me la había cargado. Qué es mejor que me zurren ellos a mí.
ME PARECE MUY BIEN LO QUE HAN HECHO EN ÁLAVA.
bueno estas noticias son buenas sacarlas a la luz para que algun listo se de cuenta a lo que se enfrenta.
agur