El nuevo Gobierno Vasco ha expresado su intención de paralizar el proyecto «Fracking», una técnica muy discutida y controvertida por su impacto ambiental, iniciado en su momento por el PSE-EE. Así lo ha indicado la nueva consejera de Medio Ambiente y Política Territorial, Ana Oregi, que confirma así el recelo mostrado por el propio Iñigo Urkullu en campaña electoral.
«La extracción de gas debería respetar las reglas medioambientales y con las técnicas de hoy eso no es posible», explicaba Oregi ayer en Euskadi Irratia. No obstante, la consejera avanza un paso más allá al descartar de antemano que la técnica del fracking pueda superar las normas medioambientales, tal y como siempre dejaba entrever el anterior Ejecutivo.