Irán es probablemente uno de los mejores destinos cinegéticos del mundo, si no el mejor, para la caza de montaña por su variedad de especies de caza: íbex bezoar, ocho tipos de carneros, gacela, oso y cómo no, una increíble población del tan ansiado jabalí. La población de jabalíes es realmente impresionante y al tener una esperanza de vida alta sus colmillos se desarrollan hasta alcanzar tamaños que llegan a pasar los 30 cm. Los agricultores están desesperados con los jabalíes, ya que les destrozan los campos. Cuando recorres diversas zonas por la noche te encuentras con muchas personas que duermen en pequeñas chozas e incluso pequeñas antorchas para tratar de espantarlos, lo cual no les da mucho resultado.
Me comentaba el traductor que hay zonas donde de momento no dejan cazar que los jabalíes son verdaderas plagas. No hace falta decir que ¡muchos estaríamos encantados de ir a solucionarles el problema! Las formas de caza del jabalí que acostumbran a realizar son en ganchos, recechándolos con algún perro por el día y luego fareando por la noche. Para las dos primeras el mejor periodo es entre octubre y marzo, pero para cazar por la noche se puede ir durante toda la temporada.
De momento no usan la espera para cazarlos pero estoy seguro de que no tardarán mucho en implantarla. El alojamiento, dependiendo de la cantidad de cazadores, fechas y zona de caza, se puede hacer en algún hotel de la zona o en una casa privada. Las categorías de los hoteles no son iguales a las que conocemos en España, pero resultan cómodos y adecuados. En las casas privadas nos tocará compartir habitación con otros cazadores pero dispondremos de un equipo de gente pendiente en todo momento de nuestras necesidades.
El equipo de caza varía dependiendo de la modalidad, pero siempre estarán totalmente pendientes del cazador y de ayudarle en todo lo que le haga falta. Por ejemplo, para la caza nocturna el equipo consta de un guía, un chófer y un ???capitán???, este último es el jefe de los guardas forestales de la zona donde se vaya. El vehículo que se usa es un ???pick up???, en la parte trasera se acomodan el cazador y el guía, el cual llevará el foco para localizar a los animales. El horario es de jornada completa, es decir, ya sea caza diurna o nocturna se aprovecha todo el tiempo, incluso si uno físicamente aguanta, se puedes ir a batidas o a rececho, y luego estar toda la noche fareando. Los terrenos son variados, campos de cereal, bosques y zonas con solo pequeñas matas a 2.700 metros de altura??? esta altura ya es considerable de por sí pero aún lo es más cuando partes del hotel a nivel del mar.
Para la caza diurna no hay un número mínimo de personas, aunque indudablemente si vas una o dos personas sería muy difícil hacer un gancho para ti y conseguir que los jabalíes te entren, pero entonces lo que se hace (si el cazador anda) es buscarlos con un par de perros y cuando localizan dónde está encamado el cazador se sitúa y lo hacen salir para abatirlo.
Las batidas y los recechos son bastante entretenidos por el número de animales que se mueven. Si queremos hacernos con un buen ejemplar habrá que saber tener paciencia y dejar pasar los animales pequeños. Si tenemos mucha suerte, podremos cruzarnos con algún leopardo; el año pasado a un amigo le entró uno en el puesto y al poco rato un excelente ejemplar de jabalí, ¡no se puede pedir más para un gancho! Si uno tiene una forma física muy buena puede en invierno recechar jabalíes siguiendo las huellas en la nieve: es una forma muy efectiva también de hacerte con un gran ejemplar pero es bastante dura.
En el viaje en el cual se hicieron las fotos de este artículo el resultado final fue de 15 jabalíes. Quitando dos que fueron pequeños, con colmillos de 15 y 17 cm, los demás tuvieron entre 20 y 26 cm de longitud, lo cual fue un resultado bastante bueno. En cuanto a tamaño de cuerpo, el más grande pesaría sobre los 170 kg. Teherán es una ciudad muy interesante para visitar y si os acompaña la pareja y no quiere ir al cazadero pues puede quedarse perfectamente ahí para disfrutar de unos días de turismo.