Tras anunciarse durante esta semana que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León habría acordado la suspensión, como medida cautelar, de la temporada de caza menor en la toda la comunidad, finalmente, parece que los cazadores pueden respirar tranquilos. Ayer, el Consejo de Gobierno de Castilla y León se reunió de forma extraordinaria y urgente para aprobar el Decreto por el que se regula la conservación de las especies cinegéticas, su aprovechamiento sostenible y el control poblacional de la fauna silvestre.
Por su parte, el Consejo Regional de Caza también celebró una reunión de forma urgente con el fin de aprobar la nueva Orden Anual y adaptarla al Decreto.
La Federación de Caza de Castilla y León espera que estas medidas puedan ser publicadas en el BOCYL el próximo viernes, con lo que «quedaría asegurado el ejercicio de la Caza en Castilla y León», afirman desde la entidad.