La Mesa Extremeña de la Caza (MEC) lamenta el análisis precipitado, simplista y desproporcionado que un dirigente agrario de la región ha realizado sobre la situación de la tuberculosis bovina en Extremadura. Y es que si el sector de la caza fuese el único responsable de la prevalencia de esta enfermedad animal, el problema ya estaría solucionado.
En este sentido, la MEC quiere destacar el compromiso del sector cinegético en la lucha contra la tuberculosis bovina, demostrado en los últimos meses, y deja claro que la caza no puede ser en ningún caso el problema, como sugiere el presidente de Asaja Extremadura, sino que forma parte de la solución. Eso sí, de una solución que debe implicar a todos los sectores y en la que todos deben asumir su cuota de responsabilidad en lugar de echar balones fuera en forma de amenazas.
La Mesa Extremeña de la Caza recuerda que, según los datos facilitados por la propia Administración regional en la última reunión de la Mesa de Tuberculosis, la incidencia de esta enfermedad en las canales analizadas en avala la falta de seriedad de aquellas que criminalizan al sector cinegético sin reflexionar sobre qué es lo que ellos mismos han hecho mal. Los cazadores han demostrado su responsabilidad y compromiso, colaborando con la Administración en todo momento, implementando todas las medidas que se han ido poniendo sobre la mesa y, además, costeando de su bolsillo muchos de los gastos generados.
Otro de los aspectos que olvidan los que critican al sector de la caza es el daño que está sufriendo la cabaña cinegética por la aplicación de las medidas de reducción de poblaciones. Esto está siendo especialmente grave en el caso de las comarcas calificadas VC4 -comarcas de caza mayor según el Plan General de Caza de Extremadura-, donde estas medidas están causando daños irreparables en la cabaña cinegética y propiciará importantes perjuicios económicos a medio y largo plazo.
Por otra parte, la MEC quiere destacar el esfuerzo que están llevando a cabo la mayoría de los ganaderos, los gestores cinegéticos y la propia Administración en la lucha contra la tuberculosis bovina. De hecho, el plan regional con esta enfermedad ha reforzado su presupuesto con más de 3 millones de euros adicionales, lo que permite hacerse una idea del compromiso de la Junta en este ámbito.
Ante esta situación la Mesa de la Caza quiere hacer un llamamiento a la calma y recordar que en breve se llevará a cabo una nueva reunión de la Mesa de la Tuberculosis. Es allí donde deben plantearse todas las propuestas para que sean analizadas y debatidas por todos los sectores. Pero siempre desde la prudencia, desde el rigor científico y desde la seriedad. Otros planteamientos que se puedan hacer no son más que intentos de enfrentar a diferentes sectores, cuando la realidad es que en casos como éste sólo es posible el éxito desde la unión de todos y no desde el enfrentamiento.