Resultan del cruce entre los cerdo vietnamitas abandonados por personas después de comprarlos y llevarlos a sus casas, con jabalíes salvajes. Son una seria amenaza para la pureza genética del jabalí. El Cerdolí es una realidad presente en numerosas Comunidades Autónomas.
¿Por qué no denuncian estos abandonos y el peligro que generan los animalistas?
La respuesta es muy sencilla. Porque quienes abandonan estos animales no son cazadores y los grupos animalistas anti caza, buscan precisamente la complicidad de ese tipo de personas para acabar con la caza.
Noticia en LA VOZ DE GALICIA:
Un vecino de Chantada fotografió la semana pasada un extraño animal en la ladera del monte Faro. «Era máis pequeno que un porco bravo e parecía máis manso», explica Iván Olmedo, que se lo encontró cuando circulaba con su coche por una de las pistas asfaltadas de la falta del monte perteneciente al municipio de Chantada.
El animal caminaba solo por medio de la carretera y se apartó un poco cuando vio que venía un coche. Ni aceleró el paso ni se mostró huidizo, cuando Iván Olmedo se acercó a él sin bajar del vehículo. Al contrario, en un primer momento incluso se le acercó con curiosidad.
El hecho de que caminase suelto por el monte hace pensar en un jabalí, pero el ejemplar fotografiado por Iván Olmedo presenta algunas diferencias importantes con estos animales. «Os porcos bravos teñen o fuciño moito máis prolongado e este é chato», explica el biólogo Pedro Alonso Iglesias. Especialiado en mamíferos, Iglesias apunta otra diferencia más al ver la fotografía, porque el pelo de la parte superior del lomo es más lacio y no forma la característica cresta de los jabalíes.
Iglesias cree que se trata de un híbrido de dos o más razas porcinas, como cerdo común, jabalí y quizá cerdo vietnamita.
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