Con la llegada de la segunda quincena de agosto, los cazadores vascos acudirán a los campos de Castilla y León, Araba o Nafarroa para disfrutar de la media veda de la codorniz. La campaña se asoma con cierta incertidumbre debido a la sequía que en algunos casos está obligando a adelantar las cosechas y que podría generar un posible desplazamiento de las poblaciones hacia el norte.
Los campos castellano-leoneses no son ajenos a la situación general, aunque la provincia de Burgos afrontará la campaña en mejor situación “porque se han producido más precipitaciones”, señala el presidente de la Oficina Nacional de Caza y de la Federación de Caza de Castilla y León, Santiago Iturmendi.
Aunque rechaza el tópico de que se producen más capturas cuando hay buena cosecha y se reduce el número de piezas cobradas cuando la cosecha es mala, Iturmendi reconoce que las estadísticas demuestran que “coinciden el nivel de capturas y de pluviometría. A más lluvias más capturas”, asegura.
Tras detectar “una entrada de codornices bastante fuerte”, la campaña se presenta esperanzadora para Iturmendi porque sostiene que, tras la recolección del cereal, “en lugar de permanecer en los campos estas aves se desplazan a zonas de linderas y espacios más frescos”.
Aunque no cuentan con datos precisos sobre la cría de la codorniz en Araba, Florencio Markina, doctor en Ciencias Biológicas y responsable de Aran Servicios Medioambientales, asegura que “se están viendo un buen número de ejemplares” y añade que “los machos acuden en buen número al reclamo”.
La pertinaz sequía que ha obligado a adelantar la cosecha de cereales, sin embargo, puede tener consecuencias inciertas de cara a la media veda. “Los agricultores han adelantado dos semanas la cosecha y, además, recogerán antes la poca paja que hay y ararán los campos, lo que hará que las codornices se vayan”, señala Markina. Esa situación “podría provocar que se desplacen a zonas de pastos de Gipuzkoa o Bizkaia.
El Presidente de la Federación navarra de caza, Ángel Remírez, no sabría si atribuir o no a la sequía “un hecho singular ocurrido entre el 16 y el 18 de junio. Más de una decena de cazadores mes han asegurado que han visto pase de codorniz en la zona de Belate y que ha sido muy abundante”.
A pesar de ello, los datos relativos a la Comunidad foral son dispersos, “ya que en algunas zonas en las que han empezado a cosechar apenas han salido, mientras que en otras han salido bastantes”. De todas formas, cree que “no va a ser problema abatir el cupo de diez ejemplares” que impone la normativa vigente en Nafarroa.