Desde hace un tiempo a esta parte me estoy dando cuenta de la dejadez en la que nos vemos sumergidos los cazadores, y no me refiero sólo a la dejadez por parte de administraciones y demás entes que cada día más arriman posturas a aquellos sectores autodenominados ecologistas, probablemente ???por la gracia de Dios???, autoproclamados salvadores de la naturaleza. Me refiero a la dejadez de los propios cazadores, del individuo en sí respecto a temas relacionados con algo que, a priori, le preocupa y mucho, como es la caza.
No sé si es que estamos en un mundo lleno de vagos o simplemente que la gente no se quiere mojar el culo para defender lo de los demás, que aunque en principio no le afecte a él directamente, acabará llegándole inevitablemente. Ese egoísmo nuestro, que mientras lo propio no se toque ni nos movemos del sofá, no vaya a ser que salgamos escaldados, se convierte en un ???sálvese quien pueda??? que puede acabar con la caza y con los propios cazadores, nosotros mismos estamos dando pie a que aquellos que no nos quieren ni ver el pelo lo tengan fácil para atacarnos y tratar de hundirnos.
Nos cuesta movilizarnos, nos cuesta trabajar por lo nuestro, somos un colectivo grande pero aún y todo seguimos dispersos, la unión tiene que ser lo que nos lleve a algún lado. Asociaciones como ADECAP consiguen que el asociacionismo en sí funcione perfectamente, demostrando que la unión de un grupo que lucha por intereses comunes es la única vía para defender la caza.
ADECAP lo demuestra cada año en las campas del aeródromo de Dima, lo demostró en Donosti en la manifestación de los años 90 y lo demostró en Madrid en 2008. Grandes asociaciones, que reúnan a grandes números de cazadores son la solución a muchos de nuestros males, la presión que pueden ejercer, la gente que pueden movilizar, etc. Son sinónimos de grupo compacto, de unión, y es por todos bien sabido que la unión hace la fuerza, y con esa fuerza y con esas ganas es con las que tenemos que tirar hacia adelante, mirar hacia un futuro en el que la caza esté en el lugar donde se merece estar, y no en el que algunos la quieren dejar.
Así que dejémonos de egoísmos y tonterías similares, aportemos a la comunidad de cazadores nuestras ideas, nuestro granito de arena, trabajemos con nuestras asociaciones y tratemos de mejorar todo esto que nos rodea, que al final, es lo que nos importa. Y es que, si pusiéramos un mínimo de interés en la caza como lo ponemos en otras tantas cosas que muchas veces son más superficiales en esta vida, bastante mejor nos iría.
Tienes mucha razon Mikel. Creo que los cazadores debemos de estar unidos. Sois un ejemplo a seguir.