La mejora gradual de la calidad
de las aguas de los ríos, la
eliminación de algunas
presas, y un Plan de
Gestión de la Anguila
elaborado por el Gobierno Vasco y
las diputaciones de Gipuzkoa y
Bizkaia en 2008 como respuesta al
requerimiento del Consejo
Europeo, ha hecho que la anguila
colonice nuevos espacios, pasando
casi de la UVI a una
situación de
recuperación. La
angula es el alevín del pez
anguila, único alevín
cuya captura permiten las leyes de
pesca. Nace en el Mar de los
Sargazos, no lejos de Cuba, y es
arrastrada por las corrientes hasta
aquí. Cuando se encuentra
en los mercados de pescado suele
tener 1 gramo de peso, mide algo
menos de 8 centímetros de
longitud y tiene entre dos o tres
años de vida. Las angulas
comercializadas suelen estar
cocidas. En caso de estar vivas son
trasparentes.
Fue el año 1970 a partir
del cual las poblaciones de
anguilas comenzaron a descender
de manera alarmante en toda la
Península Ibérica
así como en Europa. Las
causas del declive fueron la
sobrepesca, cuando los
métodos de pesca
artesanales empezaron a ser
sustituidos por artes menos
selectivas y más eficaces.
Por otra parte, otra de los
obstáculos fueron las
centrales eléctricas y las
presas que se construyeron a
pocos kilómetros del mar y
que hacen que a las anguilas les
resulte imposible remontar y
colonizar otros espacios, así
como la contaminación. La
polución en los ríos
es otro de los factores que ha
contribuido al declive de la especie.
Diversos estudios atribuyen
también a especies
depredadoras, principalmente a los
cormoranes, el retroceso de la
anguila.
En la década de los
años 70, la lonja de pescado
de la localidad asturiana de San
Juan de la Arena, a orillas del
río Nalón
registró la entrada de
60.000 kilos de angula. Cuarenta
años después,
apenas se contabilizaban 272
kilos. Desde entonces hasta ahora,
la situación apenas
sí ha mejorado. El declive
de la especie es un hecho
constatado. “La anguila
está en una encrucijada.
Pero el descenso no sólo se
ha observado en el
Cantábrico, sino en toda
Europa”, se afirma en un
informe del Área de
Recursos Demersales de Azti-
Tecnila. Gipuzkoa, sin embargo,
tiene motivos para mirar al futuro
de esta enigmática especie
con algo más de
optimismo. “Hemos
observado que la anguila
está recolonizando espacios
porque ha mejorado la calidad del
agua y se han eliminado algunos
de los obstáculos que le
impedía remontar”,
se afirma en el citado informe.
La especie que proliferó
en todas las cuencas del
País Vasco se encuentra
poco menos que en la UVI. Se
estima que actualmente el
reclutamiento, es decir las angulas
que entran en los ríos
europeos, es sólo entre un
1% y un 5% del que había
hace apenas cuatro
décadas. Los
científicos afirman que este
retroceso no obedece a una causa
única.
La sobrepesca es sin duda uno
de los factores que han contribuido
a este declive. “Antes, por
ejemplo, para la pesca de angula
se empleaban métodos
artesanales, pero desde los
años 70 se han ido
incorporando artes menos
selectivas y más
eficaces”, afirman los
expertos de Azti-Tecnalia.
Junto a la sobrepesca, los
obstáculos a la
migración impiden que las
anguilas colonicen todo su
hábitat potencial.
“Históricamente, la
anguila ha poblado casi toda la
península. Había
anguilas en Pamplona, en Madrid…
Se dice que es una especie que es
capaz de vivir a una altitud de
hasta mil metros. Hoy, sin
embargo, las poblaciones se
localizan en las franjas costeras.
Ahora, las presas infranqueables
que se construyen a pocos
kilómetros del mar hacen
que les resulte imposible remontar
y colonizar otros espacios”,
explican los expertos.
En Euskadi, los principales
obstáculos son, junto a las
presas, las centrales
hidroeléctricas.
“Estas barreras generan una
pérdida de la
producción de anguila
adulta aguas arriba y al mismo
tiempo hacen que la densidad de
ejemplares sea mayor en las
aguas que quedan en los cauces
bajos. De esta manera, se produce
una mayor mortalidad debido a la
competencia que se da entre
ellas”.
Mejora de las
aguas
Pero en los últimos
años, han mejorado las
aguas. “En el Oria, con las
papeleras, o en la ría de
Bilbao y en el Deba la
polución fue un grave
problema. Pero hoy la
situación es distinta. En
Gipuzkoa, la anguila está
recolonizando espacios porque ha
mejorado la calidad del agua y
porque se han derribado algunas
de las barreras que les
impedían remontar. Por
ejemplo, en Usurbil, en el Oria, la
Diputación ha instalado un
paso de anguila que permite que
individuos de la especie
suban”.
Diversos estudios atribuyen
asimismo a especies
depredadoras, principalmente a los
cormoranes, el retroceso de la
anguila. La comunidad
científica coincide,
asimismo, en señalar que
los cambios de las corrientes
oceánicas derivados del
cambio climático, unido a la
presencia de agentes
contaminantes en las aguas y las
infecciones que se expanden en la
población de anguilas
contribuyen al retroceso de la
especie. Si los ejemplares adultos
no están sanos y con las
reservas necesarias no
llegarán al Mar de los
Sargazos, donde se reproducen.
Hay que tener presente que la
migración de regreso dura
un año y medio o dos y que
durante este periodo no se
alimentan, cierran los conductos
digestivos.
Medidas a
adoptar
Tras décadas de
declive, el diagnóstico sobre
la situación de la anguila es
claro. Pero ¿cómo se
recuperará la especie?
Después de un largo
periodo de diez años de
negociaciones, en 2010 se
aprobó en Europa el plan
de recuperación de la
anguila en el Estado
Español.
En Euskadi, este proyecto
propone medidas sobre la pesca,
las centrales hidroeléctricas,
un control sobre los depredadores
y mejoras medioambientales
así como de control y
seguimiento. “Aunque la
comisión también
propone como medida de
gestión realizar
repoblaciones de anguila, esta
medida, sin embargo, genera
cierta controversia, ya que por un
lado no tiene mucho sentido
repoblar mientras no se solucionen
el resto de los problemas. Por otro
lado, no está claro que las
anguilas repobladas sean capaces
de volver al Mar de los Sargazos
para completar el ciclo. Por ello, el
plan de Euskadi aboga por realizar
una serie de pruebas
experimentales de
repoblación; que en el caso
de que se demuestren que son
efectivas, se incorporarán al
plan de
recuperación”,
concluye el informe de Azti.
Las capturas de
angulas han crecido en los tres
últimos
años
La campaña de pesca de
angula en Euskadi ha comenzado
el pasado 16 de noviembre
acompañada de un
optimismo prudente por los
resultados de las tres
últimas temporadas, en las
que se ha constatado un aumento
de la especie. El año pasado
se saldó con 2.400 kilos
capturados en las cuencas vascas,
de los cuales el 75% se
pescó en las rías
guipuzcoanas. La cifra supone un
incremento del 60% respecto al
ejercicio anterior y más del
doble que hace dos. Si se toma
como referencia el año 2008,
el peor ejercicio de los que se
tienen registros, la
comparación resulta
aún más llamativa:
las capturas son ocho veces
mayores. Estos resultados,
todavía lejos de los
registros históricos de hace
varias décadas, suponen un
salto esperanzador dentro del plan
de repoblación de esta
especie, objeto de una estricta
protección desde 2007 en
toda Europa.
“Es una buena
señal pero aún es
pronto para hablar de
recuperación desde el punto
de vista científico»,
aseguran los investigadores de
Azti, que representa a las
comunidades autónomas
en el grupo de trabajo de anguilas
del ICES (International Council for
the Exploration of the Sea). Los
expertos no rebajan la importancia
de los resultados más
recientes, pero guardan todas las
cautelas ante un posible cambio de
tendencia en la población
de crías de anguila, cuyos
números siguen siendo
bajos. “Todavía
está fuera de los
límites biológicos de
recuperación”,
insisten con los datos puestos en
perspectiva. “Antes de que
empezara a subir las capturas hace
tres años, el reclutamiento
de la especie -cuando pasan del
agua salada al agua dulce-
rondaba el 5%, ahora llega al 10%.
Se ha doblado, pero queda lejos
de los objetivos”.
También obliga a la
prudencia otro dato que puede
parecer contradictorio. Mientras
sube la población de
angula, la de anguila está
bajando en el conjunto de Europa,
lo que significa que los alevines no
llegan a convertirse en ejemplares
adultos. “Es un dato que hay
que tener en cuenta
también para analizar el
conjunto de la especie”,
dicen desde Azti.
De momento, el aumento de la
población de angula se
traducirá en Euskadi en un
aumento de licencias, solo para la
pesca de tierra -también
hay embarcaciones-. Hasta la
fecha, no se concedían
nuevos permisos ni tampoco se
renovaban a aquellos pescadores
que no hubiesen entregado el
cuaderno de capturas dentro del
plazo establecido por la ley. El
número de licencias ha ido
reduciéndose. Sin embargo,
la campaña de este
año, que comenzó el
pasado 16 de noviembre y se
prolongará hasta el 31 de
enero, incluirá una
novedad: se permitirá
renovar su licencia a aquellos
pescadores registrados de
anteriores años que no
habían cumplido con la
obligación legal de entregar
los datos de captura, algunos de
los cuales continuaban con la
actividad de manera furtiva.
El resto de la normativa
permanece intacta. Cada pescador
podrá capturar un
máximo de dos kilos de
angulas por día para
consumo propio. En la actualidad,
en Gipuzkoa operan 228 licencias,
de las cuales 42 son para
embarcaciones y el resto pesca
desde tierra. La
comercialización de la
angula pescada en Euskadi
está prohibida.