Un menor de tres años ha sufrido esta tarde el brutal ataque de un perro de la raza Bull Terrier en el municipio madrileño de El Molar. El suceso ha tenido lugar a las 16.50 horas. El niño ha sido trasladado urgentemente por una UVI del Summa al Hospital de La Paz con pronóstico grave.
El menor atacado por el perro, presenta arrancamiento de las orejas, varias heridas faciales y una mordedura en el muslo izquierdo. Tras el suceso, ha sido llevado por sus padres al Centro de Urgencias Extrahospitalarias del municipio y, desde allí, ha lo han trasladado en UVI al citado hospital.
La Guardia Civil, que no recibió inicialmente notificación de los hechos por parte de los padres, se personó en el hospital madrileño para hablar con ellos. Estos relataron a los agentes que estaban en la casa de un amigo y que el niño se quedó jugando con el perro de la raza Bull Terrier. Instantes después, lo hallaron inconsciente y con mordeduras. El Seprona se ha hecho cargo de la investigación. La vida del menor no corre peligro, según las citadas fuentes, y se encuentra estable.
La ley intenta acotar qué especies son peligrosas. El Real Decreto 287/2002, que modifica la ley de 1999 que rige la «tenencia de animales potencialmente peligrosos» establece ocho razas caninas dentro de esta categoría. Pit Bull Terrier. Staffordshire Bull Terrier. American Staffodshire Terrier. Rottweiler. Dogo Argentino. Fila Brasileiro. Tosa Inu.Akita Inu. Además de los perros pertenecientes a estas razas o que hayan sido engendrados a través del cruce de las mismas, la ley considera «potencialmente peligrosos»
Ser mayor de edad, un seguro de responsabilidad civil a terceros, una prueba psicotécnica y cumplir con unas determinadas características físicas y psicológicas son algunos de los duros requisitos que hay que cumplir para conseguir la licencia que permite poseer cualquier raza catalogada como peligrosa.